La referente de Juntos por el Cambio había dado positivo por Covid-19 el 16 de junio y desde entonces, atravesó el aislamiento sin síntomas, trabajando desde su casa.
La ex gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, confirmó este domingo a través de Twitter que recibió el alta definitiva luego de tener coronavirus.
La ex mandataria había dado positivo el 16 de junio y desde entonces, atravesó el aislamiento sin síntomas, trabajando con normalidad desde su casa.
“Hoy finalmente con el alta médica llegaron mis hijos a casa. Quiero agradecer a todos los que me acompañaron y me mandaron mensajes de recuperación. Cada uno ayudó a curarme”, publicó junto a una foto con cuatro platos.
VOLVIMOS A SER 4❤️❤️❤️❤️ pic.twitter.com/L1q3Y1cDvC
— María Eugenia Vidal (@mariuvidal) July 12, 2020
La referente de Juntos por el Cambio agradeció “al Dr. Javier Pollan, la Dra. Victoria Ceretti, el Dr. Jorge San Juan, a Fernán Quirós y al Dr. Alberto Crescenti y todo el equipo del SAME” por “el cuidado y la tranquilidad hasta que llegó el alta”.
Se presume que la ex gobernadora se habría contagiado tras haber estado en contacto con el diputado bonaerense Alex Campbell, que pocas horas antes había confirmado estar infectado.
El diputado, a su vez, había estado reunido con dirigentes cercanos a Martín Insaurralde, el intendente de Lomas de Zamora, quien fue dado de alta tras sufrir la enfermedad hace dos semanas.
Entre sus últimas apariciones públicas, estuvo un encuentro virtual con militantes opositores de La Matanza. “Es clave. Todo aquel que tenga ganas de participar, de expresarse, que no está de acuerdo con el camino que propone el Frente de Todos, tiene que saber que tiene un lugar”, les dijo en ese momento la ex mandataria.
“Tenemos que ir a buscar a los que tienen estos valores y esta convicción. Desde hace un mes y medio estoy encontrándome de forma online con gente de muchas regiones del país, y en cada lugar me sorprende la cantidad de gente que se convoca”, agregó.
“Aún con Covid-19 y pese al aislamiento, la gente dice ‘acá estamos’. Como cuando empezaron a golpear las cacerolas porque no querían que liberaran a personas que habían cometido delitos graves. Acá estamos, de pie, dispuestos a seguir defendiendo las mismas convicciones”, manifestó en ese momento.
Se refirió, además, a los rumores de disputas dentro del PRO: “Puede haber diferencias coyunturales porque somos muchos, y somos diversos. Ese espacio, de república, de libertad, de progreso genuino, de dignidad, que construimos en el 2015 con la UCR, con la Coalición Cívica y el PRO, sigue ahí”.
Y apuntó también al gobierno de Kicillof: “Nadie tiene nada para ganar cuando todos los días se cuentan muertos. Eso no quiere decir dar la razón en todo. Ser oposición también significa decir lo que está mal. Como cuando dijimos que esta crisis no es solo sanitaria, también es económica”, aclaró.
