La Corte Suprema deberá dar un dictamen sobre las clases presenciales

El abogado constitucionalista, Andrés Gil Domínguez, manifestó que el máximo tribunal “nunca ha funcionado como juez de primera instancia” y que “puede llamar a una audiencia de conciliación” para tratar las presentaciones por las medidas de Alberto Fernández.


La presentación de Horacio Rodríguez Larreta ante la Corte Suprema es el último bastión de la oposición para dar vuelta la decisión del presidente, Alberto Fernández, sobre la suspensión de las clases presenciales. El abogado constitucionalista, Andrés Gil Domínguez, explicó las medidas que tendrá que tomar el máximo tribunal.

La Corte nunca ha funcionado como un juez de primera instancia, que también tiene sus plazos en dictar una medida cautelar. Puede llamar a una audiencia de conciliación, eso lo veo más factible. No sé si la situación de alta tensión hará que la Corte cambie, si lo hace será para buscar una solución intermedia que no deje un ganador y un perdedor”, manifestó Gil Domínguez en diálogo con Código F por Radio Continental.

Asimismo, el abogado aclaró que los tiempos de la justicia pueden llevar a esto para largo. “Es urgente, pero no es algo que si no se resuelve en una semana pierde la vida una persona” sostuvo ante las presiones de la oposición por una rápida definición por parte de la Corte.

“Los conflictos que no resuelve la política los tiene que dirimir el Poder Judicial, esa es su función. No le tengo miedo a que la Justicia intervenga; que lo haga es el fracaso de la política”, agregó Gil Domínguez.

Además, agregó sobre la jurisdicción que tienen los gobiernos. “CABA tiene las mismas prerrogativas que una provincia y el mismo lugar. Las fuerzas federales tienen que manejarse de forma consensuada entre Ciudad y Provincia de Buenos Aires”, cerró.

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