En varios campos se hallaron decenas de novillos muertos por las altas temperaturas. También afecta a peces.
La ola de calor en el norte y centro de La Pampa encendió un alerta por la mortandad de vacunos y peces. El caso más grave se dio en un campo de Quemú Quemú, cerca de General Pico, donde se encontraron muertos a 66 novillos de entre 200 y 250 kilos.
Los hallaron todos apilados, porque se cree que se habían juntado para darse sombra y murieron por las altas temperaturas. Los casos se repiten en campos cercanos.
También se registra una alta mortandad de peces, mayormente carpas y pejerreyes, que aparecen flotando y tirados en las orillas de lagunas de Santa Rosa y del oeste de Buenos Aires.
El veterinario que analizó los animales explicó que la mortandad se produjo por las altas temperaturas y la falta de reparo del sol. “Esto hace que los animales se junten para darse sombra. Pero el contacto genera más temperatura, con golpes de calor que les producen paros cardíacos”, dijo Orueta.