El fiscal de la causa que investiga la muerte del cura, Diego Avila, anunció que recibió un primer informe de los peritajes que se realizan sobre los tres teléfonos encontrados en la iglesia de La Florida, en Tucumán, y que en uno de ellos hay mensajes amenazantes hacia el párroco Juan Viroche, quien denunciaba el avance de narcos en la zona.
Además, el funcionario judicial no descartó ninguna hipótesis. “Así como antes sólo teníamos indicios de que se podría haber tratado de un suicidio, con estas pruebas vamos a profundizar la línea del homicidio. Tampoco podemos desechar la posibilidad de que el sacerdote haya decidido o que haya sido inducido a quitarse la vida”, señaló.
«Quiero aclarar que el comunicado oficial del Arzobispado es un mensaje directo del Papa, él dice que no envió a una persona para ver este tema”, manifestó el abogado del arzobispado tucumano, Facundo Maggio. En cuanto a la función de querellante, manifestó que la Iglesia no la toma «por dos razones: la primera porque en la provincia de Tucumán la persona jurídica no puede ser querellante y, segundo, porque la familia quiere asumir ese rol y privar a la familia de cumplir ese rol no es prudente. La Iglesia ayuda desde donde puede”.