Los vientos han desatado varios focos que ya han arrasado miles de hectáreas. Cerraron escuelas y cortaron autopistas.
Gran parte del noroeste de Los Ángeles (California) sufre de cuatro incendios que obligaron a cortar carreteras, cerrar escuelas y la evacuación de 200 mil personas, tras perder decenas de edificios, entre ellas mansiones millonarias del barrio de Bel Air, en Beverly Hills.
Las condiciones del terreno, muy seco, y la fuerza de los vientos, con rachas de hasta 50 kilómetros por hora, alimentan con fuerza las llamas.
El alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, informó en rueda de prensa de que las llamas en el sector de Bel Air se han extendido a 60 hectáreas, lo que triplica la superficie afectada cuando se desató esta pasada madrugada en una zona en la que trabajan 350 bomberos. Este incendio, que ya superó en total las 4.576 hectáreas, ha obligado a la evacuación de más de 100.000 residentes, causó la destrucción de al menos 30 casas y obligó a decenas de escuelas a permanecer cerradas.
Además, otros tres incendios en el condado de Los Ángeles avanzan con fuerza impulsados por los conocidos ‘Vientos de Santa Ana’, propios de esta temporada del año. Según informó el Departamento de Bomberos del Condado de Ventura (VCFD), cerca de 1.800 efectivos luchan contra unas llamas que amenazan 12.000 estructuras, aunque más de 150 quedaron ya calcinadas. Las propicias condiciones meteorológicas continuarán al menos hasta el viernes sobre la mayor parte de los condados de Los Ángeles y Ventura, proyectó el Servicio Nacional Meteorológico (NWS) de Estados Unidos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, envió por medio de su cuenta en la red social Twitter un mensaje de aliento a los damnificados: «Nuestros pensamientos y oraciones están con cada uno de los afectados por los incendios forestales de California». El gobernador de California, Jerry Brown, declaró el estado de emergencia en los condados de Ventura y el de Los Ángeles e insistió a los residentes de estas zonas en la importancia de evacuar las áreas de riesgo.