En el partido entre San Miguel y CADU dos jugadores chocaron las cabezas e Isaías Olariaga se llevó la peor parte: chocó con la cabeza con un rival y al caer comenzó a convulsionar.
En la final del Reducido de la Primera C se enfrentaron San Miguel ante Defensores Unidos en la Cancha de Arsenal, y en los primeros minutos se vivió el momento más tenso del encuentro: no por la situación de gol, sino porque Isaías Olariaga y Javier Velázquez yendo a disputar una pelota en el área golpearon fuertemente sus cabezas.
El jugador del Trueno Verde, Olariaga, fue quien se llevó la peor parte del momento ya que cuando cayó desplomado comenzó a convulsionar. Pero el rápido accionar del árbitro del encuentro, Yael Falcón, quien no dudó en practicarle los primeros auxilios le salvó la vida. “Vi que el jugador de San Miguel estaba convulsionando e intervine. Cuando uno está boca arriba, la mayor causa de muerte es por la lengua que impide que la persona pueda respirar. La convulsión dura un poco, es un proceso y después termina. Una vez que llegaron los médicos me hice a un lado y les permití intervenir a ellos», explicó el juez.
El defensor, que sufrió el hundimiento y aplastamiento de cráneo, fue derivado en primera instancia al Hospital Argerich. Luego, fue trasladado a la clínica Finocchieto para la intervención quirúrgica.
El doctor Norberto Furfaro aclaró que el jugador del Trueno Verde se encuentra “lúcido y estable”. “La operación será hoy por la tarde; alrededor de las 16 o 17 horas”, afirmó el doctor.
