El candidato a Presidente por Consenso Federal sostuvo que cuando se tocó el tema de los derechos humanos “uno hablo de Ecuador, otro sobre los juicios de los militares y otros dos no dijeron nada. Y lo más importante en este sentido es hablar del hambre en la Argentina».
Con apenas unos días por delante para las elecciones presidenciales, el candidato a Presidente de la Nación por Consenso Federal, Roberto Lavagna consideró que «para los usos y costumbres de los países desarrollados fue una campaña muy larga. Durante muchos meses, francamente hubo muy poca producción de propuestas». El político diferenció en este sentido a su espacio, del resto: «Nosotros trabajamos mucho en propuestas y recién los últimos dos meses con el armado político».
Sobre la última semana que tuvo los debates de los candidatos, Lavagna sostuvo que sufrió «la incomodidad de acostumbrarse a tiempos muy cortos» y por otro lado y el motivo principal que lo incomodó en Santa Fe fue «la impresión de una cierta falsedad. Cuando hablamos de los derechos humanos uno hablo de Ecuador, otro sobre los juicios de los militares y otros dos no dijeron nada».
«Lo cierto que el tema principal de violación de derechos humanos es el hambre en Argentina», sostuvo el economista quien lo expresó enojado frente a sus rivales en la elección presidencial.
Sobre la propuesta específica de modificar la coparticipación federal que expuso en el debate, el postulante por Consenso Federal amplió: «Los proponemos en el marco de un programa que nosotros tenemos para replantear el mapa económico y laboral del país en favor de las economías del interior del país». Y añadió al respecto: «Las economías regionales tienen un potencial muy grande, pero hacen falta recursos y una nueva ley de coparticipación, donde la Nación le ceda a las provincias una porción de sus recursos».
En el caso de ganar las elecciones, Lavagna dice que va a modificar un concepto que es erróneo para salir airosos de la crisis económica. «La receta de primero estabilizarse para luego poder crecer tarda mucho tiempo y es de dudoso resultado. Hay que movilizar los recursos que ya existen para ir mejorando los desequilibrios».
«Solo en el marco de una economía en marcha va a ser posible equilibrar los problemas que existen, por ejemplo el problema fiscal», agregó.
«Buena parte de la inflación tiene que ver con fenómenos monetarios, y nosotros no somos capaces de emitir dólares, lo cual impone una limitación muy fuerte», sostuvo el economista que rechaza la posibilidad de que los problemas económicos se solucionen dolarizando la moneda.
El mensaje de Lavagna que sostiene su frase «Presidente o nada» es clara: «De ganar obviamente tendremos diálogo con todos» y agrega: «Nosotros nacemos como una fuerza que le reclama el diálogo a los dos extremos de la polarización. Sin la menor duda dialogaríamos con cualquiera que sea el ganador de las elecciones».
