La responsabilidad recaerá sobre Ignacio Greco quien ya cumplió esa función en la Ciudad con Macri. El cambio es parte de las reformas en seguridad que incluyen la compra de 800 patrulleros y más gendarmes.
María Eugenia Vidal sigue restando poder a la cúpula de la Policía bonaerense. Su ministro de Seguridad, Cristian Ritondo, eliminará una oficina que, controlada por un uniformado, manejaba parte de los fondos de la fuerza.
El traspaso se ejecutará mañana cuando Ritondo firme la resolución que «suprime» la Superintendencia de Coordinación Administrativa y designa las funciones a un civil, Ignacio Greco, actual subsecretario Legal, Técnico y Administritativo del Ministerio de Seguridad.
La medida nace en respuesta a una serie de irregularidades que se detectaron en la gestión de los fondos de la fuerza en los últimos meses y se encuadra dentro de la reforma que la gobernadora Vidal lleva a cabo en la seguridad de la Provincia desde que comenzó su gestión.