Es un sondeo de Real Time Data. Se evaluó la imagen de las gestiones, desde Amado Boudou hasta Martín Guzmán.
Por Eduardo Paladini para Clarín.
Desde hace más de 10 años, la inflación se convirtió otra vez en la principal preocupación de los argentinos. Comparte podio con la inseguridad, la corrupción y también con otros pesares de la economía, como el desempleo y la recesión. En ese contexto, se entiende que la gente no está demasiado conforme con los principales encargados de encaminar las cuentas. Y así lo reflejó una nueva y particular encuesta a la que accedió Clarín, donde se evaluó a los últimos ministros de Economía de la Nación. Desde Amado Boudou hasta Martín Guzmán. ¿El resultado? Reprobaron todos. Pero a algunos les fue más mal que a otros: por ejemplo a Nicolás Dujovne, que terminó último.
El estudio que muestra las imágenes de estos dirigentes es de Real Time Data (RTD), una consultora que nació hace unos años y hace relevamientos de actualización diaria que vende a clientes del país y el exterior. Todos los meses publica un sondeo nacional con datos de coyuntura y algunas mediciones particulares como ésta. Su último trabajo se hizo entre el 2 y el 8 de febrero e incluyó 950 casos.
En el capítulo de las valoraciones de los dirigentes, la firma que conduce el politólogo Nicolás Solari planteó: “Indique cómo evalúa el trabajo que hizo cada uno de los ministros de economía que tuvo Argentina en los últimos diez años”. Se daban cinco opciones: «Muy buena», «Buena», «Mala», «Muy mala» y «No lo conoce».
Además de Boudou (2009-2011) y Guzmán (2019 hasta hoy), pasaron por el filtro Hernán Lorenzino (2011-2013), Axel Kicillof (2013-2015), Alfonso Prat-Gay (2015-2016), Nicolás Dujovne (2017-2019) y Hernán Lacunza (2019). Los cuatro primeros mencionados funcionarios de Cristina Kirchner, los últimos tres de Mauricio Macri.
Los siete terminaron con diferencial en rojo. Es decir, sus gestiones tuvieron una evaluación más negativa que positiva. Con esa lógica, el menos malo resultó Guzmán: combinó 37% de imagen a favor (16% «Muy buena» y 21% «Buena») y 47% en contra (29% «Mala» y 18% «Muy mala»). El resto dijo no conocerlo o prefirió no opinar de sobre su gestión. Su balance resultó – 10.
En la otra punta aparece Dujovne, la cara económica de la debacle macrista. El ex panelista de TV sumó 17% de positiva (2% «Muy buena» y 15% «Buena») y 67% de negativa (24% «Mala» y 43% «Muy mala»). Presenta el peor diferencial: – 50 puntos.
Apenas mejor quedaron Lorenzino y Boudou.
– El ex ministro famoso por su frase «me quiero ir» -en medio de un reportaje, no quería hablar de inflación- es el menos conocido (33% de «No lo conoce»), pero los que lo recuerdan lo hacen en general mal: tiene 1% de «Muy buena», 12% de «Buena» (13% de positiva), 24% de «Mala» y 30% de «Muy mala» (54% de negativa). Balance – 41.
– El ex vice, que demora su vuelta a la cárcel por el caso Ciccone y sigue con prisión domiciliaria, combina 26% de positiva (10% de «Muy buena» y 16% de «Buena») y 64% de negativa (14% de «Mala» y 50% de «Muy mala»). Diferencial – 38.
En una escala intermedia -de peor a mejor- quedaron Lacunza, Kicillof y Prat-Gay. El último ministro de Macri terminó con – 27 puntos de diferencial (24% de positiva y 51% de negativa), el primero con – 22 (32% de positiva y 54% de negativa) y el actual gobernador con – 24 (36% de positiva y 60% de negativa).