Nicolás Trotta, ex ministro de Educación, reveló que la toma de decisiones es monopolio de Alberto Fernández y que hay «un esquema de decisión que no logra desplegar el trabajo en equipo».
El ex titular del Ministerio de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, cruzó a la gestión actual ya que consideró que «no logró desplegar las respuestas que la sociedad estaba esperando» y cuestionó las formas de trabajo de Alberto Fernández y compañía: «No hay un esquema de trabajo interno ni se ha podido plasmar un horizonte en común», consideró.
En declaraciones radiales, Trotta sostuvo: «Es un Gobierno que no ha logrado consolidar un esquema de trabajo interno, que tiene características de coalición porque se construye a raíz de distintas referencias, pero que no ha podido plasmar un horizonte común y esto ha llevado a diferencias y equivocaciones en el ejercicio de toma de decisiones con el presidente Alberto Fernández a la cabeza».
Posteriormente, resaltó la labor de Sergio Massa al frente del Ministerio de Economía: «Lo que uno puede destacar es que el ingreso de Sergio Massa ha permitido, en estos tiempos de complejidades, correr esas tensiones en el campo económico para enfrentar desafíos muy complejos que tiene la Argentina, con una realidad inflacionaria a la que no se logra encontrarle una respuesta concreta».
También hizo referencia a la decisión que se tomó de removerlo del cargo en el Ministerio de Educación tras la determinación de suspender las clases presenciales en el AMBA durante la cuarentena: «El Presidente tomó una decisión contraria a esa construcción de consensos, pero también dividencias, y es ahí donde se puede ver un ejemplo de una toma de decisión que no se sostuvo sobre esa mirada integral que debe tener la república. He tenido esa y otras diferencias que implicaron una ruptura de confianza mutua y una salida a posterior del gobierno».
En este sentido, profundizó: «Muchas veces ha ocurrido el escenario donde los ministros no despliegan las decisiones por ausencias de indicaciones claras o por el Presidente que contradice o no escucha la mirada de sus ministros. Lo he sufrido en particular», y agregó: «Ya es la prehistoria, pero conversamos con el Presidente tres o cuatro días después y yo no encontraba información que respaldara esa medida cuando habíamos encontrado ese consenso».
Por otro lado, reveló que es Alberto Fernández quien tiene la toma absoluta de decisiones y que las formas de trabajo dentro de esta gestión están marcadas por «un esquema de decisión que no logra desplegar un trabajo en equipo. Hoy el que toma las decisiones finales y lo vemos en la construcción de este gabinete es el presidente Fernández. Ahí está el problema, nunca se ha podido establecer un esquema de toma de decisión colectiva, porque es la primera vez que tenemos un Presidente que no es una figura excluyente de los demás sino que debería haber construido complementariedad con la vicepresidenta, con el hoy ministro de economía, y con los gobernadores».
«No creo que sea un Gobierno fallido, sí que no logró desplegar las respuestas que la sociedad estaba esperando. El Gobierno de Alberto Fernández transitó tres años de recesión en los últimos años, la Argentina estaba con enormes dificultades y después vino una pandemia. Han cambiado las fuerzas políticas al frente del Poder Ejecutivo pero no se han logrado dar las respuestas necesarias», consideró luego.
Para cerrar, aseguró que «como coalición, desde el Frente de Todos nunca nos comportamos como tal y eso es una equivocación», al mismo tiempo que expresó sus expectativas en cuanto a la llegada de Massa a Economía: «Queda un año de gobierno con múltiples desafíos, y creo que, por parte de la sociedad, esperamos que el ministro de Economía tenga las capacidades para hacerles frente».