Se trata de Alejandro Werner, actual director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo.
Alejandro Werner sería desplazado y dejaría su cargo en el FMI, a causa del fracaso del acuerdo con la Argentina. Werner es el actual director del Hemisferio Occidental del Fondo y, por lo tanto, el máximo responsable técnico del convenio con la Casa Rosada.
Según informa Marcelo Bonelli para Clarín, lo cuestionan porque la Argentina incumplió tres veces lo pactado y el organismo hizo la vista gorda. Ahora, el convenio está virtualmente caído.
Werner sólo instrumentó técnicamente las órdenes que emitió el Tesoro de EE.UU. La ayuda extraordinaria y el aval a Mauricio Macri surgieron de una decisión política de la Casa Blanca. Pero Donald Trump no pagará ese costo político. Tampoco Christine Lagarde. En el FMI ahora hay un mal clima hacia la Argentina y los directores -todos los europeos- quieren “cabezas”.
Es costumbre en el FMI que los errores los paguen los burócratas: en este caso sería Werner y hay dudas sobre Roberto Cardarelli.
En Wall Street afirman que el desplazamiento no sería abrupto y llevaría un tiempo. Se presentaría como una reorganización de Kristalina Georgieva. Warner tendría un destino: se iría al Banco de Ajuste de Basilea. Su titular es el influyente mexicano Agustín Carstens.