Miles de personas se acercaron hasta la Casa Blanca para reclamar por el asesinato en manos de la policía. Washington, Minneapolis, Nueva York y Los Ángeles fueron los principales focos de las maniestaciones.
Horas de tensión se vivieron este domingo en Washington DC, capital de los Estados Unidos, luego de que miles de manifestantes se congregaran frente a la Casa Blanca para pedir justicia por el crimen del afroamericano George Floyd en manos de la policía.
Luego de varios días de protesta en las principales ciudades del país, entre las que se incluían Minnepolis -donde fue llevado a cabo el asesinato- Nueva York, Los Ángeles y Florida, y que repercutieron en la aplicación de un toque de queda para 40 regiones de toda la nación, el pedido de justicia y el reclamo en contra de la brutalidad policial llegó hasta la sede central del gobierno del país norteamericano, provocando que los agentes del Servicio Secreto trasladaran al presidente Donald Trump a un búnker de máxima seguridad ubicado en la plata baja del edificio.
Una vez comenzada la manifestación en la capital, y tras tornarse violentas al incluir destrozos varios y lanzamiento de proyectiles contra la Casa Blanca, el mandatario ordenó la intervención del ejército en vistas de disipar las protestas no solo en Washington, sino también en el resto del país.
https://twitter.com/kylejmcfadden/status/1267269852923932672
Según se informó, al menos 4100 personas fueron detenidas durante los seis días de tensión que se vivieron en Estados Unidos, entre las que se incluyó, por ejemplo, la hija del gobernador de Nueva York, quien participó en uno de los tantos pedidos de justicia por el crimen contra Floyd.
Además, en Minnesotta un camión cisterna intentó, deliberadamente, arrollar a las miles de personas que tomaron las calles, mientras que en Los Ángeles un vehículo policial actuó en el mismo sentido contra dos personas que se manifestaban en la ciudad de la costa Oeste.
En las últimas horas Terrance, hermano de Floyd, rechazó las actitudes violentas al destacar que George «era un motivador pacífico”.
“Él quería paz y unidad. Pero lo que está pasando ahora, pueden llamarlo unidad, pero es una unidad destructiva, y mi hermano no apoyaba eso. Todos dicen que él era un ‘gigante gentil’”, explicó y sumó: “A veces me enfado, también quiero romper algunas cabezas y volverme loco. Pero estoy aquí. Mi hermano no apoyaba eso”.