Lo notificó el abogado de la familia al juzgado de Claudio Bonadio, que autorizó la salida del país de madre e hija.
La hija de la ex presidenta Cristina Kirchner, Florencia Kirchner, padece de una enfermedad llamada linfedema, que significa la acumulación de líquido linfático en las piernas, según argumentó el abogado de los Kirchner ante la Justicia. A Florencia se le había detectado esa dolencia en agosto del año pasado.
El dato surge del pedido presentado el viernes por el abogado defensor de madre e hija, Carlos Alberto Beraldi, ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal 5 (TOCF5), en el marco de la causa conocida como Los Sauces.
Florencia había obtenido un permiso de la Justicia para viajar en febrero por un mes a Cuba con fecha de regreso 10 de marzo, es decir el domingo pasado. Pero el viernes 8, Beraldi informó de esta situación al tribunal y consiguió que el permiso se le extienda por unos ocho días más.
«Informo de viaje», decía el título de los escritos presentados por Beraldi para notificar de la ausencia de la ex presidenta por los próximos días. La ex presidenta no tenía la obligación de informar ni de pedir permiso de salida del país salvo en las causas en las que tuviera una medida restrictiva al respecto.
El primer juicio oral que tiene agendado Cristina Fernández es el que llevará a cabo el TOCF2 a partir del 21 de mayo por presunto delito en la adjudicación de obra pública vial en la provincia de Santa Cruz.
Florencia Kirchner, según se publicó, había estado internada en la Clínica Favaloro por un «problema ginecológico menor» en 2014. El 16 de agosto del año pasado fue internada unas horas en ese mismo centro de salud por un edema linfático crónico en los miembros inferiores.