A diferencia del ex presidente, el ministro porteño avaló la cuarentena: Salvó una catástrofe sanitaria.
Por Martín Bravo para Clarín.
Aferrado a su mantra de evitar la confrontación, Horacio Rodríguez Larreta se mantuvo al margen de las controversias que generó la reaparición pública de Mauricio Macri en la misma jornada de otro banderazo en contra de Alberto Fernández y Cristina Kirchner. El jefe de Gobierno prolongó el silencio, aunque el ministro porteño Fernán Quirós replicó los fuertes cuestionamientos del ex presidente a las medidas para intentar contener el coronavirus.
Rodríguez Larreta alegó compromisos de gestión, con los preparativos para el regreso de actividades presenciales en las escuelas y la reapertura de los shoppings, para no involucrarse en las protestas contra el Gobierno ni quedar atravesado por las polémicas que levantó Macri.
Su repliegue incluyó la ausencia a la reunión virtual de la mesa nacional de Juntos por el Cambio, la mañana siguiente a las marchas y a la entrevista del ex mandatario en TN. Tampoco se conectó María Eugenia Vidal, su aliada y también referente del ala moderada de la coalición.
“La cuarentena precoz salvó una catástrofe sanitaria, que es muy difícil de ver porque no ocurrió. No es sencillo observar lo que hubiera ocurrido”, aseguró Quirós durante una conferencia de prensa, en la que explicó que el sistema de salud no hubiera resistido sin las medidas de aislamiento dispuestas por Alberto Fernández y en esa instancia avaladas por Rodríguez Larreta.
“En la Ciudad la velocidad de crecimiento era de 2,2 y eso nos llevaba a un pico a principios de mayo. No hubiéramos tenido ninguna capacidad de atender de manera digna, humana y correcta a todo el mundo en ese momento”, dijo el ministro del área.
“A partir de allí hemos trabajado por ir desandando lenta y progresivamente, eso entiendo que quiso decir el ex presidente”, buscó luego conciliar Quirós con la posición de Macri. “Esta cuarentena eterna ha sido muy dañina y sin ningún resultado a la vista, porque estamos entre los peores países en términos de resultados frente al coronavirus”, había dicho el fundador del PRO en TN.
Rodríguez Larreta procuró restarle importancia a las controversias sobre la reaparición pública de Macri. “Siempre supe lo que él pensaba de la cuarentena”, dijo el jefe de Gobierno porteño a sus colaboradores con la intención de evitar entrar en una polémica. En la sede de Uspallata incluso intentaron relativizar la respuesta de Quirós: aseguraron que no estaba previsto que saliera a cruzar a Macri y que respondió una pregunta en la conferencia de prensa.
El jefe de Gobierno también buscará mantenerse al margen del ruido que provocó Macri al cuestionar a Rogelio Frigerio y Emilio Monzó, el ex ministro del Interior y el ex titular de la Cámara de Diputados que negociaban con los gobernadores y los referentes opositores en el Congreso.
Desde diciembre ambos expresaron una postura de centro, en línea con la llamada ala moderada de Juntos por el Cambio referenciada en Rodríguez Larreta. Le respondió Sebastián García de Luca, con una alusión a Marcos Peña.
“La gestión y estrategia política se definía en la Jefatura de Gabinete, sus ojos y oídos. No éramos nosotros quienes tomábamos esas decisiones”, dijo el ex viceministro y actual diputado. “Más que una crítica fue una autocrítica”, intentaron bajarle el tono en Parque Patricios.
Acaso la definición de Macri que más interesó a Rodríguez Larreta fue su distancia del próximo turno electoral: “No me veo como candidato”, soltó el ex mandatario. Era lo que venía manejando, y aunque no está confirmado dicho en público suena bien para su proyecto presidencial.