El equipo de Marcelo Gallardo se impuso 4 a 3 ante Rosario Central en una final electrizante y con varias polémicas. Alario fue la gran figura con 3 goles, mientras que Alonso selló la victoria. Marco Ruben y Musto fueron los goleadores del Canalla.
CÓRDOBA – El estadio Kempes fue el escenario de una final inolvidable y con todos los condimentos. River venció a Rosario Central 4 a 3, tras estar dos veces abajo en el marcador, y se consagró campeón de la Copa Argentina 2016. De esta manera, el millonario consigue uno de sus principales objetivos: clasificar a la Copa Libertadores 2017.
A los 10 minutos del primer tiempo, Lucas Alario abrió el marcador para los de Nuñez desde tiro del penal. El canalla respondió rápido: a los 25 Fabián Musto sentenció el empate tras un error del arquero Batalla y minutos después Marco Ruben dio vuelta el resultado.
Cuando parecía una remontada categórica del equipo rosarino, el árbitro Losteau cobró un nuevo penal para River y Alario lo convirtió en gol para irse al entretiempo 2-2.
En el complemento el trámite se hizo aún más friccionado. En el minuto 17, el Canalla elaboró una gran jugada colectiva que recorrió todo el campo de juego para que José Luis Fernández remate y Marco Ruben empuje la pelota a la red tras una floja respuesta previa de Batalla.
Con una nueva desventaja en el marcador, Gallardo movió el banco, sacó a Andrés D’Alessandro y Gonzalo Martínez y mandó a la cancha a Iván Alonso junto a Rodrigo Mora. Así, River ganó presencia en el área y llegó así al empate transitorio: tras un centro al área que derivó en una habilitación del propio Alonso, apareció nuevamente el pipa Alario para poner el tercero en su cuenta personal y establecer el 3 a 3.
Casi como una respuesta inmediata a las modificaciones del entrenador Millonario, los delanteros invirtieron los roles y le devolvieron la ventaja al equipo: esta vez, Alario le bajó un centro a Alonso para que el uruguayo defina y, tras un rebote, decrete el 4-3 definitivo.
Con este resultado, el conjunto riverplatense logró su primera Copa Argentina y el pasaje a la próxima edición de la Copa Libertadores. El muñeco Gallardo consiguió su sexto título en un total de ocho finales.