Presentó una nota en la que anuncia que dejará el cargo a partir del 31 de diciembre. Estaba sospechada por la compra de un edificio de la Procuración.
Alejandra Gils Carbó renunció a su cargo al frente de la Procuración General de la Nación. Mediante un escrito, la jefa de los fiscales, anunció que dejará de ser funcionaria a partir del 31 de diciembre.
La jefa de los fiscales se encuentra procesada como coautora del delito de administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública, por la compra de un edificio en la calle Perón al 600 para que funcionen las oficinas de la Procuración. También era muy cuestionada por el Gobierno de Macri por su afinidad con el kirchnerismo.
Por el inmueble se pagaron 43 millones de pesos y se abonaron comisiones que rondaron los 10,7 millones de pesos.