La Cámara de Apelaciones en lo Comercial revocó un fallo de primera instancia y ordenó reabrir un juicio por salarios impagos a los trabajadores de Tiempo Argentino, por parte de los empresarios Sergio Szpolski y Matías Garfunkel.
La causa fue presentada por los haberes impagos a tres empleados, pero se entiende que se extenderá al resto de los trabajadores de la empresa Balkbrug, que regenteaba el diario. “Como Szpolski y Garfunkel no pagaron los sueldos ni despidieron a nadie, la Justicia aceptó que nos paguen con los activos de Balkbrug, que consiste en publicidad oficial por cobrar y el mobiliario de la empresa”, dijeron los trabajadores a Clarín.
Los camaristas Alfredo Kölliker Frers, Isabel Míguez y María Elsa Uzal consideraron probada “la deuda invocada por los accionantes”. Además ordenaron que de no poder pagarse los sueldos a los tres delegados gremiales, la empresa decrete la quiebra.
Por otra parte, los camaristas rechazaron que los tres trabajadores representen la demanda colectiva de sus más de 200 compañeros que forman la cooperativa Por Más Tiempo, que actualiza la web y edita el diario dominical.
La fiscal general ante la Cámara Comercial, Gabriela Boquin, intervino anteriormente para acompañar el pedido de los trabajadores e investigar posibles delitos económicos como el lavado de dinero. Un informe de la Procelac, convalidó la hipótesis de “socios ocultos” por detrás de Szpolski y Garfunkel en la editorial Veintitrés.
Entre los apuntados se encuentra Juan José Gallea, actual director de Administración y Finanzas de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI). La diputada de la Coalición Cívica Elisa Carrió pidió la renuncia de Gallea, pero el Gobierno lo ratificó en su puesto.