Mirtha Legrand volvió a la pantalla con sus almuerzos y en lo que fue su vuelta cargó duro contra el gobierno y hasta habló de su vacuna preferida para luchar contra el Covid-19
En medio de un estricto protocolo de seguridad, este sábado, tras nueve meses de ausencia en la televisión, Mirtha Legrand regresó a su programa de los sábados, La noche de Mirtha, el cual estuvo bajo la conducción de su nieta, Juana Viale, durante los últimos meses.
En medio de su charla con Juana Viale, la Chiqui, dio detalles sobre el estricto confinamiento que mantuvo debido a la pandemia de la COVID-19 y expresó su deseo por recibir la vacuna.
«Fue difícil. Al principio era todo muy placentero por quedarse en casa y tener tiempo para ver televisión, leer y comer; después estuve insoportable», sostuvo la diva y aprovechó el momento para agradecer públicamente a su asistente: «Le mando un beso a Elvira, mi asistente».
«Quería salir, pero por protocolo no debía. Yo estoy en zona de riesgo, acá me han hecho una burbuja y está todo esterilizado», agregó Mirtha Legrand dejando en evidencia los cuidados que tomaron para que pudiera asistir al set de grabación.
Posteriormente, la conductora de La noche de Mirtha expresó su preocupación por la situación sanitaria actual y dejó clara su intención de vacunarse. «La cosa está muy delicada, yo quiero aplicarme la vacuna», dijo la Chiqui.
La revelación de la diva de la televisión provocó que Juana Viale le consultara qué vacuna desea aplicarse. «¿Qué vacuna te pondrías?» preguntó la actriz.
«La de Pfizer. Hoy empezaban a aplicarla en Chile«, detalló Mirtha Legrand. Poniendo en apuros a su abuela, la conductora de los últimos meses de La noche de Mirtha le preguntó a la diva si se aplicaría la vacuna desarrollada por Rusia. «Y… no sé», se sinceró la Chiqui.
El encuentro entre la abuela y nieta más famosas de la tele se vio en la pantalla de El Trece a partir de las 20.30, pero el operativo y la logística del regreso comenzó mucho antes, al mediodía. Si bien ya había trascendido que, al contar con su presencia, en el estudio se había montado un «operativo burbuja» para evitar los riesgos de contagio