El juez federal Ramos Padilla confirmó la instancia para los des ex integrantes de la Agencia Federal de Inteligencia, al tiempo que les incluyó un embargo de 20 millones de pesos.
En un fallo de 979 carillas, Alejo Ramos Padilla concluyó que Gustavo Arribas y Silvia Majdalani fueron partícipes de la causa de espionaje ilegal que se realizaba desde las bases de la Provincia de Buenos Aires y consideró que «existía una directiva de carácter general» que ordenaba a los agentes de la AFI «realizar inteligencia ilegal emanada de la máxima autoridad del organismo».
El juez federal remarcó que hubieron «órdenes concretas para investigar ilegalmente a las agrupaciones, movimientos y actividades contrarias a los intereses políticos o electorales de la entonces gestión de gobierno, que fijaba los parámetros específicos de producción de información que era de interés recopilar».
La causa recibió el nombre de «AMBA» e incluyó embargos de 20 millones de pesos para los dos ex integrantes de la Agencia Federal de Inteligencia, quienes ya habían sido procesados por otros hechos de inteligencia ilegal el 5 de agosto en la causa que investiga el juez federal de Lomas de Zamora, Juan Pablo Auge, y en la que declararon diferentes funcionarios.
Ramos Padilla, además, procesó a otros nueve ex agentes de la AFI por el hecho de ser coautores «en virtud de haber obtenido información, producido inteligencia y almacenado datos sobre personas, por el solo hecho de sus acciones privadas, u opinión política, o de adhesión o pertenencia a organizaciones partidarias, sociales, sindicales o comunitarias».