Es por incumplir normas de seguridad. El juez Roberto Gallardo ordenó al Gobierno porteño que impida el funcionamiento y exige que los empleados tengan casco y luces reglamentarias en sus bicicletas.
El juez Roberto Gallardo ordenó prohibir la actividad de las aplicaciones de delivery hasta que esas compañías cumplan “requisitos mínimos legales” de seguridad para los empleados, que incluyen luces reglamentarias, casco, seguros y libreta sanitaria.
El magistrado porteño exhortó al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires a impedir que empresas como Rappi, Glovo y Pedidos Ya continúen funcionando. La respuesta no tardó en llegar desde una de las empresas, en la cual sostienen que esta sentencia “pone en riesgo la continuidad de las fuentes de ingreso de miles de personas”.
“Como surge del relevamiento efectuado por la Policía de la Ciudad, el servicio de mensajería urbana y reparto a domicilio de sustancias a domicilio llevado a cabo en la CABA por las firmas prestatarias, se realiza en franca transgresión a la normativa vigente, y sin que se les exija al menos, dar cumplimiento a las normas básicas en materia de seguridad”, indica el informe de Gallardo.
Un último relevamiento de seguridad vial arrojó que en un total de 400 motos y bicicletas, se concluyó que el 77% circulaba con el portaobjetos cargado en su espalda, lo que está prohibido para el transporte de sustancias alimenticias, el 70% desempeñaba tareas sin seguro alguno y por último un 67% transitaba sin casco.
Y advirtió que “es necesario aplicar las medidas coercitivas necesarias para lograr que se dé cumplimiento estricto y sin demora a las disposiciones contenidas en el Código y en su decreto reglamentario, al menos en lo atinente a utilización de casco, de luces reglamentarias, y en caso de llevar caja portaobjetos, que la misma se encuentre asegurada al vehículo, así como existencia de seguro y de libreta sanitaria en caso de transporte de sustancias alimenticias (artículos)”.