Natalie Weber habló a corazón abierto sobre los cuernos y contó como era ella cuando empezó su relación con Mauro Zárate.
Y sobre su larga relación con el delantero, Natalie comentó: “No soy celosa pero fui muy celosa, fui muy tóxica. Le revisaba el teléfono una vez por semana y encontraba mensajes».
«Las minas son regaladísimas con el jugador de fútbol: hay videos, fotos, todo. A la botinera le gusta el rubro, mandan muchas fotitos”, profundizó sobre le material íntimo que varias mujeres le enviaron a Mauro y que ella vio.
«Llevo 14 años si ya no me relajo…», afirmó Natalie. Y recordó: “Los primeros años éramos muy tóxicos. A él no le gustaba que yo labure tampoco».
«La maternidad me sacó del medio, estaba con la teta, la mamadera y los pañales hasta que volví a tomar vuelo”, finalizó Weber sobre aquellos primeros año de romance.
Se generó una sorpresiva pelea entre Natalie Weber y Flavio Azzaro, invitado a Desayuno Americano, América Tv, cuando debatían el tema de las internas en el periodismo deportivo producto de los egos y el dinero.
En ese contexto, y teniendo presente las picantes declaraciones del periodista deportivo sobre Mauro Zárate, marido de Natalie, cuando dejó Vélez Sarsfield para vestir la casaca de Boca años atrás, Weber aseguró que muchos mienten y tiran fruta en clara alusión a Azzaro, momento a partir del cual se generó un tenso cruce entre ellos.
«Mentiste un año sobre Mauro, una año entero diciendo boludeces. Primero dijiste que Vélez le había dado plata al padre de Mauro… Después dijiste que Mauro era un sorete, un mercenario, un mal hermano, mal tipo, mal hijo, mal marido, mal amigo», disparó visiblemente enojada la integrante de ciclo de América TV.
Y acto seguido, explicó sus dichos: «Yo tenía la mejor con él hasta que de repente se hizo un festín cuando Mauro pasó de Vélez a Boca diciendo cosas que no tenías ni idea de nada… Sabiendo que sufríamos amenazas».
«Hay cosas que son de interpretación» se defendió Azzaro y le recordó entonces a la modelo que Zárate había asegurado que sólo jugaría en Vélez, por lo que le preguntó quién mintió realmente.
Fue allí cuando Weber admitió que su marido se arrepintió y pidió disculpas por ello el día que firmó en Boca, mientras el periodista invitado insistía en no haber dicho semejantes cosas.