El capitán de la Selección aseguró que el plantel que irá a la Copa América está «atravesando un recambio». Entre otras confesiones, dejó una perlita de su hijo Mateo: «Me carga con el Liverpool y grita los goles del Madrid».
Lionel Messi reconoció que la Argentina no es candidata a quedarse con la Copa América que se disputará en Brasil debido a que atraviesa «un proceso de recambio», aunque aseguró que el equipo saldrá «a ganar».
«No somos candidatos. Vamos con la misma ilusión y las mismas ganas de siempre, pero la realidad es que la Selección está atravesando un proceso de recambio. Hay muchos chicos nuevos, con pocos partidos en la Selección. Pero vamos a salir a ganar como siempre«, dijo en una charla con Estudio Fútbol (TyC Sports).
Messi aseguró que «siempre» quiso «jugar en la Selección» y contó que, cuando estaba en inferiores del Barcelona y no había sido citado, familiares suyos mandaban videos a la Argentina para que lo conocieran.
Consultado sobre el rol de su padre Jorge, fue claro: «Se habla mucho más de mi papá que de otros jugadores. Lo metieron en el medio de muchísimas cosas que nada que ver. Decían que metía jugadores y armábamos equipos. Una cosa es que lo digan de mí, que soy el jugador, pero ¿de mi viejo? Realmente, yo me puedo blindar y dedicarme a jugar, pero la familia la pasa mal de verdad«.
Messi contó que la «camiseta diez es especial porque la hizo importante el Diego», aunque remarcó que le da «lo mismo» utilizar cualquier casaca».
La Pulga contó la primera persona que le habló de los tiros libres fue el Coco Basile: «‘Soltá el pie, soltá el pie’, me gritaba y me decía que mis tiro libres parecían centritos y quería que lo mirara ejecutar a Román (Riquelme)».
«Fue espectacular usar la cinta por primera vez. Creo que me trabé cuando tuve que hablar en el vestuario. De ese momento a hoy cambié muchísimo. Yo no soy de hablar mucho. Soy de los que piensan que cada uno sabe lo que tiene que hacer, no creo que hagan falta arengas o motivaciones para salir a jugar. Me crié así en Barcelona, por eso no le doy tanta importancia«, afirmó recordando el partido ante Grecia en Sudáfrica 2010.
Además, opinó que «es cada vez más difícil ganar un partido solo ya que son pocos los equipos que salen a jugar de manera abierta y se exponen».
Messi dijo no pensar «más allá de lo que tenemos cercano, en la Copa América que se viene» y remarcó que sería importante obtenerla porque «Argentina hace mucho que no la gana«.
Por último, contó una anécdota graciosa de uno de sus hijos: «Mateo es tremendo. El otro día estábamos pateando la pelota y me decía que él era el Liverpool porque nos había ganado a nosotros. Estamos mirando partidos y se hace el hincha del Madrid para molestar al hermano (Thiago). Grita los goles y todo«.