La actriz se refirió sobre el movimiento por parte de las mujeres en busca de la igualdad. También habló sobre el amor por la actuación.
María Onetto habló sobre su trabajo, el amor por la actuación y sobre uno de los temas sensibles que atraviesa la sociedad, el “feminismo”: “Hay un gran movimiento de mujeres que buscan la igualdad”.
A la espera del reestreno de Sobre Mirjana y los que la rodean en el Teatro Picadero, la actriz María Onetto pasó por La Burbuja por FM Milenium y a Federico Seeber le confesó que antes de elegir la actuación se recibió de psicóloga con tan sólo 21 años. “Es muy temprano para ejercer cualquier profesión. Una vez con el título en mano tuve crisis vocacional. Fue muy angustiante”, reconoció y contó que más allá de tener ese título su vocación por estar arriba del escenario siempre estuvo presente más allá de que “al principio, era sólo un hobbie”.
Sin embargo, si bien al principio los pasos para la actuación son difícil por algunas trabas que se pueden llegar a presentar, Onetto no dejó de luchar por sus sueños y hoy disfruta de lo que hace.
“Uno cuando actúa no sólo juega a ser otro, sino que hay un paso más y es jugar a no ser. Actuar está en la naturaleza de las personas”, subrayó y agregó que, otra de sus pasiones es dar clases ya que “respeto mucho la actuación, que no se la lastime. No me gusta el actor que es canchero, o que lo hace de taquito”. Siempre siendo una mujer de perfil bajo y con humildad también remarcó que le gusta tener “interlocutores grosos que me digan lo que tengo que corregir”.
Refiriéndose a su forma de ser ante diferentes situaciones de la vida, destacó que “si tuviera que caretear, sería algo que me incomodaría mucho. Soy auténtica, me interesa discutir argumentos, buscar un sentido. La careteada no tiene sentido”
Hablando sobre un tema sensible como lo es el feminismo, la desigualdad y la violencia de género en la que está atravesando la sociedad, como mujer que destacó hoy en día “hay un gran movimiento de mujeres que buscan la igualdad. Es un hermoso y complicado momento. Me siento muy convocada con la situación. Estamos atravesados por mandatos que son inconscientes y que desconocemos”. “El feminismo nos convoca a todos, es algo que no tiene retorno. Las generaciones que nos siguen van a nacer en otro mundo”, añadió.
Por otro parte, entrando en su vida personal a sus 51 años no tiene hijos y reconoció que “me dio trabajo asumir la situación de no formar una familia. Costó defender esa libertad” aunque destacó que “quizá si algún hombre me planteaba con énfasis tener un hijo lo hubiese acompañado, pero no era algo que iba a nacer de mi naturalmente”.
