El chavista aseguró que el texto presentado por la Alta Comisionada de la ONU «presenta un panorama distorsionado» y culpó de la crisis económica a Estados Unidos.
Nicolás Maduro le envió una carta a la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, en respuesta al duro informe que la ex presidente de Chile presentó en Ginebra.
«¿Se puede hablar de ‘crisis humanitaria’ cuando el Gobierno de Estados Unidos ha despojado a Venezuela de 30.000 millones de dólares de sus activos petroleros en el extranjero y ha bloqueado y confiscado más de 7.000 millones de dólares para la compra de alimentos y medicinas?«, pregunta Maduro.
El informe de Bachelet, sin embargo, no aborda únicamente la situación económica en Venezuela, sino vulneraciones de derechos civiles y políticos.
Se menciona la «represión y criminalización de la oposición política» a través de numerosas acciones, así como torturas y miles de casos de ejecuciones extrajudiciales.
Maduro sostiene que se trata de «un informe plagado de falsas afirmaciones, tergiversaciones y manipulaciones en el uso de datos y fuentes; carente de equilibrio y rigor, abiertamente parcializado».
«Presenta un panorama distorsionado de la situación de derechos humanos en nuestro país. Sepa usted que Venezuela seguirá de pie, victoriosa, que ningún falaz informe, ni agresión, podrá con nuestra férrea determinación«, agrega el mandatario venezolano.
Y sigue: «Su reporte se alinea de manera lamentable con el relato mediático y político impuesto desde Washington, que agrede simbólicamente a Venezuela al repetir el guión acerca de la existencia de un supuesto gobierno dictatorial«.
Luego, Maduro asevera que no «puede llamarse dictadura» a un proyecto legitimado «23 veces en las urnas electorales en los últimos 20 años».
«Lamentablemente, usted ha cedido a las presiones«, le expresó Maduro a Bachelet. Y agregó: «Tristemente se ha puesto del lado de los verdaderos violadores de derechos humanos del pueblo venezolano«.