Por el efecto de la devaluación, pérdida de poder adquisitivo y las altas tasas, también se desplomaron 50% los planes de ahorro. Los ministros Dante Sica y Nicolás Dujovne comenzaron negociaciones con el sector.
La industria automotriz atraviesa un momento complicado a raíz de la fuerte devaluación que sacudió al país durante gran parte del año. Las ventas se derrumbaron 40% en octubre -en relación al mismo período del 2017- y se estima que hay un stock de autos equivalente a cuatro meses, un nivel pocas veces alcanzado en la Argentina.
Desde el sector sostienen que los principales motivos que llevaron a este presente fueron la devaluación que entonó los precios de los autos y las tasas excesivas que impiden la financiación.
Este mediodía la flamante cúpula de Adefa que nuclea a las 12 fábricas del país, hizo públicos los crudos números que padecen. .Sucede después de los cinco mejores meses de la historia como ocurrió entre enero y mayo de este 2018.
Con esos datos, los empresarios fueron a verlos sucesivamente al presidente Macri y a los ministros Sica y Dujovne. Les plantearon que con los cambios impositivos que implican para ese sector, la reducción de reintegros de 6,5% a 2% para la exportación y la aplicación de retenciones de $ 3,36 por dólar exportado, pierden US$ 500 millones entre 2019 y 2020.
Según trascendió, la Casa Rosada deslizó la posibilidad de un bono por parte del Estado a pagar en 2021 a manera de compensación, aunque es por ahora una medida en estudio. Otra es la alternativa de eliminar aranceles de importación, hoy del 14%, a todos aquellos insumos de la industria que no se fabriquen en el país, desde el acero al caucho.
