La demanda en contra de la Argentina por US$ 3.000 millones, iniciada por el fondo buitre Burford Capital, no será trasladada a Buenos Aires como pretendía el Gobierno argentino.
La Corte del Distrito Sur de Nueva York falló en contra de la Argentina y resolvió que la demanda de un fondo buitre por US$ 3.000 millones por la expropiación de YPF siga adelante en norteamérica y no en Buenos Aires como había solicitado el Ejecutivo.
Según fuentes judiciales, el Gobierno argentino tiene una instancia de apelación ante la Corte de los Estados Unidos, en la que evalúan presentarse. La millonaria demanda fue impulsada por el fondo Burford Capital, que se quedó con las acciones que estaban en poder del Grupo Petersen, de la familia Eskenazi.
Según consignó, TN.com.ar, el fondo reclama 3.000 millones de dólares, que se sumarían a los US$5.000 que se pagaron a Repsol. Al momento de la reestatización, la Argentina debió haber hecho una oferta por todas las acciones y no solo por el 51 por ciento, según reclama el fondo litigante. Así se desprendería del estatuto de YPF de 1993, presentado ante la comisión de valores estadounidense.
Los inversores compraron dos empresas residuales que pertenecían a los Eskenazi, Petersen Energía Inversora y Petersen Energía. Estas compañías se constituyeron hace una década, cuando los empresarios nacionales ingresaron a YPF, entonces controlada por Repsol, de la mano de Néstor Kirchner.
Hace poco más de un año, en abril de 2017, Burford informó que vendió un 15 por ciento de esa participación -por la que ahora reclama U$S3.000 millones- en 66 millones de dólares.