«No nos encontramos ante un aporte solidario, sino ante un impuesto directo», señalan los productores rurales.
La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) advirtió que la sanción del impuesto a la riqueza podría llevar a una «liquidación de activos» en el sector agropecuario.
En una carta que envió a todos los diputados nacionales y senadores, en rechazo a ese tributo -que obtuvo dictamen en la Cámara de Diputados- la entidad advirtió: «No nos encontramos ante un aporte solidario, sino ante un impuesto directo».
«No existe un mínimo no imponible sino un mínimo no gravado, provocando esto que la persona que supere con su patrimonio en 1 peso los 200 millones de pesos (que fija el proyecto) pagará sobre el total y no sobre el excedente», alertó.
Según Carbap, el proyecto que impulsa el oficialismo «no mantiene las exenciones que fija la ley de Bienes Personales en su artículo 21 inciso f. Esto hace que los inmuebles rurales que son un elemento utilizado en la producción agropecuaria queden alcanzados».
«A este efecto es necesario discernir o separar entre un bien de carácter suntuario o financiero y un bien de carácter productivo como son las parcelas rurales», añadió.
Por ese motivo, la entidad reclamó «excluir de este tributo las parcelas rurales y los bienes muebles y semovientes utilizados en la producción».
Sin modificaciones, el proyecto «obligaría a la liquidación de activos, además de no permitir los procesos de reinversión tan necesarios dada la realidad económica de nuestro país», se quejó.
La iniciativa incluye a todas aquellas personas físicas cuyos activos superen los 200 millones de pesos.
A esta postura de Carbap se suma a la movida que iniciaron productores rurales del norte bonaerense, que pidieron que los chacareros cierren sus cuentas en el Banco Credicoop, que preside Carlos Heller, diputado nacional que impulsa este impuesto.