La nueva ministra de Trabajo, que ya otorgó una suma extra para el sector público de $30.000, ponderó la labor realizada teniendo en cuenta el contexto inflacionario por el que atraviesa Argentina.
Kelly Olmos, nueva ministra de Trabajo tras la renuncia de Claudio Moroni, adelantó que está en «mesa de negociación» la posibilidad de entregarles a los trabajadores del sector privado un bono de fin de año para intentar paliar los impactos negativos que presenta el contexto económico nacional actual al bolsillo.
En declaraciones radiales, aseguró que «el bono de fin de año está en la mesa de negociación y forma parte de los instrumentos que tenemos que mirar como alternativas para enfrentar el contexto inflacionario».
«Lo que más me preocupa es que ese bono pueda favorecer también a los trabajadores informales, donde es difícil llegar con derechos», profundizó luego.
Las declaraciones de la titular de la cartera se da luego de que Eduardo ‘Wado’ de Pedro adelante las tratativas de esta opción por parte de Cristina Kirchner, actual vicepresidenta, y Sergio Massa, ministro de Economía: «Están pensando en una suma fija para que aquellos que perdieron con la inflación puedan recuperar su nivel de consumo», detalló.
Previamente, fue a los trabajadores del sector público a quienes se les aseguró una suma extra de fin de año de $30.000 tras las negociaciones con los gremios ATE y UPCN.
Por otro lado, apoyó el acuerdo reciente que cerró el Sindicato de Camioneros en las paritarias con vigencia por 16 meses, logrando un incremento salarial del 107%, y se mostró expectante ante el crecimiento de la inflación confiando en que durante este año «no exceda el 90%». «Es realmente difícil que los ingresos puedan recuperarse con el vigor que nosotros deseamos», profundizó.
En alusión a la situación paritaria, resaltó el «compromiso y participación» que se viene generando: «Siempre hay una compensación entre una situación puntual y el impacto que puede tener a nivel general. Pero lo que hay que rescatar que el sistema de paritarias es una institución muy vigorosa en la Argentina. Este año hemos suscripto más de 2.700 convenios paritarios, con una dinámica de compromiso y participación que ha sido excelente».
Por último, remarcó que Argentina «tiene un gran sector informal y de autoempleo, producto de las políticas neoliberales, que son los que están más retrasados en el proceso de alta inflación«, por lo que es importante «asumir entre todos un compromiso de quebrar la alta inflación, porque con esa dinámica los salarios van siempre por detrás«.
