Gerardo Morales, María Eugenia Vidal y Miguel Pichetto llegarán antes. Los precandidatos a gobernador buscan despegarse de las internas nacionales.
Por Martín Bravo para Clarín.
Con el foco en las propuestas sobre agroindustria y producción, la mesa nacional de Juntos por el Cambio se reunirá este viernes en Río Cuarto, Córdoba, y en la previa algunos referentes aprovecharán para sumar actividades y reuniones en el segundo distrito electoral del país. A diferencia de otras provincias, los precandidatos a gobernador no expresan por el momento un alineamiento nacional, por la percepción de que la elección local otra vez quedará separada de la disputa presidencial.
“En Córdoba está todo bastante revuelto, todavía no está claro cómo va a cuadrar el esquema provincial en la estrategia nacional”, coincidieron dirigentes del radicalismo y el PRO con influencia en el armado en ese territorio con impronta antikirchnerista y en el que Juntos por el Cambio intentará el año próximo cortar la hegemonía peronista.
Vencedor en las últimas legislativas, Luis Juez ya blanqueó que buscará suceder a Juan Schiaretti. El actual gobernador no podrá presentarse y como postulante del PJ asoma Martín Llaryora, intendente de la capital. Con el radical Rodrigo de Loredo, Juez se impuso el año pasado en la interna contra Mario Negri y Gustavo Santos, la lista avalada por Mauricio Macri.
Ahora el senador suma los apoyos de Patricia Bullrich y -de manera subterránea- de Horacio Rodríguez Larreta, aunque recompuso la relación con Macri y procurará mantenerse ajeno a la disputa nacional. “La gente nos quiere ver juntos”, repite en las recorridas ya con tono de campaña. Juez será parte el viernes de la reunión de la mesa nacional de Juntos por el Cambio, esta vez «ampliada» para abrir la asistencia a dirigente de Córdoba y otras provincias de la zona centro.
De cara a las pujas y las negociaciones por la candidatura, los radicales insisten en el propósito de ir candidato propio. Gerardo Morales aseguró que el partido respaldará a De Loredo, del sector liderado por su rival interno Martín Lousteau.
El jefe del bloque de Evolución en Diputados recorre la provincia, pide «reglas claras» para dirimir la postulación en una interna previa -en Córdoba no hay PASO- y a la vez se reserva la carta de ir por la intendencia de la capital.
Morales irá a Córdoba el jueves para encadenar una serie de actividades, desde una visita a un frigorífico y un encuentro con empresarios a un acto con Gastón Manes -titular de la Convención- en la Casa Radical de Río Cuarto, al que asistirán Negri, Ramón Mestre y los senadores Luis Naidenoff, Carolina Losada y Daniel Kroneberger, entre otros.
María Eugenia Vidal llegará el miércoles la provincia y tendrá reuniones con comerciantes y empresarios en Villa Carlos Paz, Villa María y la capital, además de Río Cuarto. Miguel Pichetto será otro de los que aprovechará para mostrarse con dirigentes locales y Bullrich irá la semana próxima.
En Juntos por el Cambio estiman que Schiaretti adelantará las elecciones provinciales -circula como fecha probable mayo o junio-, aunque terminará de definirlo a último momento.
Juez pidió este lunes que las fechas municipales en los municipios en poder de Juntos por el Cambio se convoquen el mismo día, a diferencia de 2015, cuando Oscar Aguad cayó por cinco puntos. Ya en 2019 Schiaretti sacó mayor ventaja, por la división del radicalismo y las candidaturas en simultáneo de Negri y Mestre.
En la sede de la Sociedad Rural de Río Cuarto, la mesa nacional arrancará el viernes por la mañana con dos horas de reunión entre los referentes del espacio y luego habrá paneles sobre agroindustria, innovación, cadenas productivas y proyección internacional del sector, después un segmento de las fundaciones de Juntos por el Cambio y el cierre a cargo de los presidentes de los partidos.
Macri no irá y Rodríguez Larreta no confirmó. A su vez por supuestas «complicaciones» en las agendas este martes quedó postergado el almuerzo de referentes del PRO que estaba previsto en un restaurante de San Telmo.
En el espacio había generado una fuerte discusión la postura en Diputados ante la prórroga de 50 años a las asignaciones específicas para las industrias e instituciones culturales. La mayoría se abstuvo -salvo Fernando Iglesias y Francisco Sánchez, que votaron en contra- y algunos decidieron ausentarse.