Pidieron que haya “información científica comprobable”. Hubo posturas encontradas sobre la Sputnik V entre los sectores duros y los moderados.
Por Martín Bravo para Clarín.
Coincidencias en las críticas a la nueva ley de movilidad previsional impulsada por el Gobierno, diferencias en el tono de rechazo al manejo del proceso de vacunación y reproches por los acuerdos en el Consejo de la Magistratura. La mesa nacional de Juntos por el Cambio cerró el año con una reunión virtual, de la que salió un comunicado luego de los cruces internos.
“Juntos por el Cambio vuelve a plantear su oposición al cambio de fórmula jubilatoria que pierde dinero en relación a la de Cambiemos, al no considerar la variable de la inflación”, plantearon los referentes de la coalición sobre el proyecto de movilidad ya aprobado en el Senado y que podría convertirse en ley este martes en Diputados.
“El operativo de vacunación debe contar con la información científica comprobable y que el trámite de aprobación sea serio y consistente en manos de nuestros organismos técnicos”, expresaron sobre el plan para intentar contrarrestar la pandemia. En el comienzo habían remitido al “año difícil con grandes sufrimientos” por las víctimas del coronavirus, la pérdida de trabajos e ingresos y el “colapso” de la educación sin clases presenciales.
Sobre el proceso de vacunación de la Sputnik V hubo otra vez diferencias entre intransigentes y conciliadores por el contenido y el tono del comunicado. Horacio Rodríguez Larreta pidió moderar las críticas y limitarlas a la exigencia de mayor información, sin interferir en la estrategia sanitaria que él mismo tendrá que implementar en la Ciudad. Luego Cristian Ritondo y Mario Negri -jefes de bancada en Diputados- repasaron los reclamos al Gobierno en la Cámara, con la iniciativa para interpelar al ministro Ginés González García y más de 25 pedidos de informes.
Otro tramo áspero sucedió cuando Juan López, de la Coalición Cívica, cuestionó el cambio de postura de los consejeros que dejaron de formar parte del bloque opositor al oficialismo en el órgano para designar y sancionar a los jueces. “Se nos pide dureza a los legisladores, muchas veces inconducente, pero en el Consejo hay una negociación que nadie sabe cuál es”, apuntó el jefe del bloque de Diputados del partido liderado por Elisa Carrió en referencia al avance de la terna con Roberto Boico -ex abogado de Cristina Kirchner, con prestigio académico-, el regreso de Eduardo Farah -cercano al operador Javier Fernández- a la Cámara Federal y otros concursos negociados con el Frente de Todos.
Los Alfredo Cornejo y Negri se sumaron al planteo. También el peronista Miguel Pichetto: “Son cosas que no se pueden dejar pasar”.
De manera implícita Mauricio Macri era el apuntado, por la influencia en el Consejo de la Magistratura de la llamada mesa judicial armada durante su gobierno. “Hubo una discusión fuerte. Los jueces actúan de manera corporativa y responden a otros intereses”, buscó salir del paso el ex presidente, en referencia a Juan Manuel Culotta y Ricardo Recondo -representantes de los magistrados- aunque le reclamaron por Carlos Matterson -delegado de los abogados-, vinculado a Daniel Angelici.
También el diputado Pablo Tonelli se plegó al acuerdo. Las palabras de Macri no dejaron conformes a los que llevaron la cuestión a la reunión: «Intentó explicarlo, pero a la argumentación le faltaron varios pedazos».
De la reunión participaron además Humberto Schiavoni por el PRO, Martín Lousteau y Luis Naidenoff por el radicalismo y Maximiliano Ferraro y Maricel Etchecoin por la Coalición Cívica. Otra vez se ausentó María Eugenia Vidal, cada vez menos conectada a las reuniones de la mesa nacional.