La ciudad de Gaza fue declarada “zona de combate peligrosa” por el Ejército israelí, que ordenó su evacuación total en medio de una ofensiva militar que ya dejó al menos 15 muertos este martes.
La ofensiva israelí sobre la Franja de Gaza se intensificó este martes con la declaración de la capital del enclave como “zona de combate peligrosa” y una orden de evacuación total para sus cerca de un millón de habitantes. Según un recuento realizado en las morgues de los hospitales por informadores locales, al menos 15 gazatíes murieron en distintos puntos del territorio.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) afirman controlar el 40% de la ciudad y difundieron un mapa en el que toda la capital aparece marcada en rojo, lo que implica que ningún civil estaría a salvo del fuego. “A todos los habitantes de Ciudad de Gaza (…), las fuerzas de defensa están decididas a derrotar a Hamas y actuarán con mayor contundencia”, escribió en redes sociales el vocero militar en árabe, Avichay Adraeeen, quien instó a evacuar “inmediatamente por el eje Al Rashid”.
El director del hospital Shifa, el mayor centro médico de la capital gazatí, Mohammad Abu Salmia, aseguró que ni él ni su equipo abandonarán la ciudad. “Nos quedaremos con los pacientes”, afirmó en un intercambio de mensajes con la agencia EFE. El hospital, con 402 camas, está completamente lleno, al igual que el resto de los centros médicos de la ciudad, que operan con una ocupación del 300%.
“La situación ahora es extremadamente peligrosa en los hospitales de Gaza”, advirtió Abu Salmia, quien detalló que hay más de 50 pacientes con ventilación mecánica, 80 bebés en incubadoras y 350 personas en diálisis. “No podemos atenderlos en ningún lugar de Gaza, ni en el sur”, subrayó, y pidió “protección internacional urgente” para los hospitales y un corredor seguro para trasladar a los heridos.
El Ministerio de Sanidad de Gaza lanzó una “llamada urgente” a la comunidad internacional para garantizar la protección de los hospitales y del personal médico, en medio de lo que describen como una situación de “hambruna, enfermedad, heridas” y agotamiento físico y mental de la población.
Por su parte, el movimiento islamista Hamas denunció que la orden de evacuación constituye un “acto explícito de desplazamiento forzoso” de los residentes de la ciudad. “Se está llevando a cabo bajo el peso de los bombardeos, las masacres, el hambre y las amenazas de muerte, lo que constituye un desafío flagrante y sin precedentes a las leyes y convenciones internacionales”, afirmó el grupo en un comunicado.