El fenómeno se despliega en el sur del país, y pese a las tareas desplegadas para frenarlas el fuego sigue incontrolable.
Con la muerte de un bombero y dos policías este miércoles ya son seis los fallecidos en el combate de las incendios forestales más extensos en la historia de Chile. La tragedia suma a cada minutos nuevos focos que suman casi 200.000 hectáreas de bosques afectadas.
La voracidad de los incendios se ha visto alimentada por los fuertes vientos que avivan el fuego y las altas temperaturas que agravan la situación desde inicios de enero.
O’Higgins y el Maule, son las ciudades más azotadas. Miles de personas fueron evacuadas y cerca de 300 resultaron damnificadas. Además, el fuego arrasó con los sembradíos y mató al ganado, según el informe de Conaf.