Según trascendió, hubo amenazas y un intento de agresión física entre ambas reclusas del Penal de Mujeres de Paraná.
Nahir Galarza, quien cumple perpetua por el crimen de su novio Fernando Pastorizzo tuvo un cruce con Griselda Bordeira, una ex sargento procesada y con prisión preventiva por vínculos con una banda narco en la que estaría implicado el intendente de Paraná, Sergio Varisco.
Según informó el Servicio Penitenciario, los roces y la tensión entre las reclusas eran constantes y en aumento en el Penal de Mujeres de Paraná. Ya se habían cruzado amenazas de muerte entre ambas, hasta que una última provocación por parte de Bordeira generó la reacción de Galarza.
Según informó el diario Uno, las penitenciaras debieron separar a las reclusas para detener la pelea. “Se pelearon por temas de ellas, por lo que se resolvió que una tenía que salir del pabellón”, indicó una autoridad de la seguridad carcelaria, por lo tanto se decidió trasladar a Bordeira al pabellón de madres.
