La diputada nacional del PRO recalcó que la presencialidad “garantiza la estabilidad emocional de los chicos y adolescentes”. Además, se refirió a las desigualdades a la hora de tener conexión a internet: “Tres de cada diez hogares no tienen acceso fijo a Internet, el 27% accede sólo por celular”.
La diputada nacional del PRO por Entre Ríos, Alicia Fregonese, alertó este viernes en Diputados TV la situación por la que están pasando muchos niños, niñas y adolescentes como consecuencia de la pandemia y de las medidas de restricción.
“Según UNICEF, el 13% de niñas, niños y adolescentes tuvieron baja o nula continuidad pedagógica y este porcentaje se eleva al 19% entre estudiantes de escuelas secundarias estatales. Esto se debe a fuertes desigualdades en el acceso a recursos tecnológicos. La mitad de los hogares no dispone de computadora para las tareas escolares. Tres de cada diez hogares no tienen acceso fijo a Internet, el 27% accede sólo por celular”, informó Fregonese.
Asimismo, la diputada nacional por Entre Ríos arrojó datos sobre la salud emocional de los chicos. “Es necesaria la vuelta a clases presenciales para garantizar la continuidad pedagógica y la estabilidad emocional de miles de chicos. Siete de cada diez adolescentes están hartos del encierro, con síntomas de depresión y sentimientos de soledad, tienen miedo de quedarse sin amigos. En menores de doce años se observan más episodios de angustia, llanto, enojo y altibajos emocionales. La violencia intrafamiliar y sexual aumentó más de un 50% desde el inicio del ASPO”.
“En medio de este contexto crítico, recién el viernes pasado tuvimos la primera reunión de la Comisión de Educación y este miércoles, la de la Comisión de Familias. Han pasado muchas cosas muy preocupantes en la educación argentina desde la última vez que nos juntamos y creo que es hora de ponernos a trabajar y de que esto sea prioridad”, expresó.
Por último, Fregonese se refirió específicamente a la situación de Entre Ríos: “La provincia está superando los mil casos diarios, con una ocupación de camas de UTI del 81,34%. El sistema sanitario está saturado, situación a la que se llegó por no testear lo suficiente y por no tener un plan de vacunación serio”.