El presidente de Bolivia hizo la advertencia en la medianoche del viernes a través de su cuenta en Twitter, luego de que estallaran motines policiales en Cochabamba, Sucre, Oruro y Santa Cruz.
Unidades de policías de tres ciudades de Bolivia se amotinaron este viernes contra el presidente boliviano, mientras la oposición exige en las calles su renuncia luego que la auditoría oficial encargada por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) boliviano concluyó que no puede «dar fe del resultado electoral» con el que Evo Morales se impuso en primera vuelta ya que todo el proceso estuvo «viciado de nulidad» por la cantidad de irregularidades documentadas.
La primera en rebelarse fue la Unidad Táctica de Operaciones Policiales (UTOP) de la ciudad central de Cochabamba y poco después se amotinaron los comandos de la policía de Sucre (sur, la capital de Bolivia) y de Santa Cruz, rica región del oriente del país y bastión opositor, según publica el portal 24Matins.
Morales hizo la advertencia en la medianoche del viernes a través de su cuenta en Twitter, luego de que estallaran motines policiales en Cochabamba, Sucre, Oruro y Santa Cruz, con el apoyo explícito de los sectores que exigen la renuncia del presidente y denuncian fraude en los comicios que le dieron la reelección.
Convoco a nuestro pueblo a cuidar pacíficamente la democracia y la CPE para preservar la paz y la vida como bienes supremos por encima de cualquier interés político. La unidad del pueblo será la garantía para el bienestar de la Patria y la paz social.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) November 9, 2019
«Hermanas y hermanos, nuestra democracia está en riesgo por el golpe de Estado que han puesto en marcha grupos violentos que atentan contra el orden constitucional. Denunciamos ante la comunidad internacional este atentado contra el Estado de Derecho», escribió Morales en Twitter.
«Convoco a nuestro pueblo a cuidar pacíficamente la democracia y la Cpe (Constitución Política del Estado) para preservar la paz y la vida como bienes supremos por encima de cualquier interés político. La unidad del pueblo será la garantía para el bienestar de la Patria y la paz social», añadió.
En la tercera semana de protestas contra la polémica reelección en primera vuelta de Morales, que han dejado tres muertos y unos 200 heridos, La Paz permanece con el transporte público restringido por bloqueos viales, oficinas estatales asediadas por opositores y el comercio a media máquina.
El mandatario izquierdista indígena, de 60 años y en el poder desde 2006, ha descartado renunciar, como exige la oposición.
Morales ha hecho oídos sordos a los reclamos que lo acusan de «fraude» electoral y de buscar ganar tiempo para perpetuarse en el poder tras aceptar una auditoría de la Organización de Estados Americanos (OEA) a los comicios.
La oposición exige su dimisión, la anulación de los comicios y nuevas elecciones sin él como candidato, mientras que el presidente afirma que los comicios fueron limpios y exige respetar sus resultados.
El expresidente y candidato opositor Carlos Mesa exigió que el Congreso designe un nuevo órgano electoral que convoque a nuevos comicios, tras un informe de la consultora panameña Ethical Hacking que describió el sufragio como «viciado de nulidad».