El candidato a diputado por Buenos Aires calificó de «inútil» al secretario de Comercio Interior y sostuvo que «todo lo que proponga va a fracasar». Propuso «juicios por mala praxis» para los políticos.
José Luis Espert cargó contra el flamante secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, al que calificó como «un desastre y un inútil» luego de que amenazara con aplicar la ley de abastecimiento que data de 1974.
El candidato a diputado por la provincia de Buenos Aires consideró que tanto la norma de abastecimiento como el control de precios «han fracasado» y fue contundente: «Está muy probado que los controles de precios son absolutamente inefectivos. Sería una burrada aplicar la ley de abastecimiento».
Embalado, Espert señaló que «Feletti es un desastre y un inútil, por eso todo lo que proponga va a fracasar. Es un incapaz». Y lo comparó con Guillermo Moreno.
«Es una nueva versión, más joven, habla mejor, es menos bestia, pero es igualmente de bruto a la hora de pensar», apuntó con munición gruesa, en diálogo con Lado P, el ciclo que conducen Eduardo Paladini y Elizabeth Peger por Radio Rivadavia.
Con un tono mezcla de bronca e indignación, Espert propuso «juicios por mala praxis» para los políticos.
«Mi propuesta sería empezar a pensar desde el Congreso en algún juicio por mala praxis a cualquier funcionario público. Porque después del fracaso en el cual va a terminar la política de precios de Feletti, no debería nunca más ocupar un cargo público».
«Ya estoy podrido, como casi todos los ciudadanos, de vivir para la mierda en Argentina con estos tipos que experimentan con nosotros como cobayos. Cuántas veces hemos hecho controles de precios y siempre han terminado mal. Hagamos algo que ya esté probado en el mundo», agregó.
Luego del pedido a productores y empresarios para congelar los precios por 90 días, Feletti amenazó con establecer por decreto una resolución de precios máximos.
«Yo me tomo como plazo el lunes para, en una u otra dirección, cerrar esto. No puede seguir así, porque se rompe el equilibrio social de la Argentina. La canasta alimentaria se va a llevar puesto el salario, no aguanta ni la paritaria», resaltó Feletti.
Sus declaraciones pusieron en alerta al empresariado y hasta el presidente de la UIA, Daniel Funes de Rioja, le respondió y le dejó un mensaje: «Políticas de precios máximos no las compartimos».
El congelamiento de precios por tres meses anunciado por Feletti no es una medida novedosa. Desde 2005, cuando en el Gobierno de Néstor Kirchner decidió llevar adelante controles a los supermercados, se reeditó, sin éxito aparente aún, una idea que había sido impulsada en la última presidencia de Juan Domingo Perón en 1973 y que había intentado ser «un ancla» para la inflación en la década de 1980.