La oposición se mostró unida y logró aprobar el proyecto tras más de 12 horas de debate.
Entre críticas a la política económica de Mauricio Macri y luego de más de 12 horas de debate, la oposición logró aprobar la ley que limita la suba de tarifas con 37 votos a favor y 30 en contra, sin abstenciones. La expectativa está puesto ahora en el veto que ya está garantizado pero que todavía no fue ejecutado.
El proyecto logró mantener a los diferentes bloques peronistas unidos y a marcar una profunda diferencia entre las posturas de la oposición y el oficialismo. Por un lado, los defensores del proyecto acusaban a la política tarifaria del Gobierno como una maniobra de «transferencia a los privados» y a los precios de los servicios como «impagables». Por su parte, los alineados a Cambiemos calificaron el proyecto de «demagógico» y advirtieron del peligro del «costo fiscal» que traería aparejado.
Mientras los más de 50 oradores exponían, el Gobierno intentó impedir la sanción de la ley aprovechando la extensión del debate para vaciar las bancas al momento de la votación al tiempo que evaluaban la posibilidad de modificar la iniciativa y así obligarían la vuelta de la iniciativa a Diputados para una segunda revisión.
Pero el peronismo ya contaba con los votos necesarios para aprobar el proyecto fortalecido con la presencia de la santiagueña Ada Itúrrez (Frente Cívico), quien iba a estar ausente por problemas de salud y la sorpresa del cambio de postura del neuquino Guillermo Pereyra (MPN) quien le dio la espalda a la propia Casa Rosada donde dijo que votaría en contra.
A favor
Una de las exposiciones sobre las que más expectativas pesaban, fue la de la ex presidenta Cristina Kichner quien habló entrada la madrugada y deslizó: «Ya es hora de que no se le mienta más a la gente; es mentira que se eliminaron los subsidios».
En tanto, cuestionó los argumentos en contra del proyecto opositor que lo calificaron de «irresponsable» y aseguró que «en materia de armonía social sería aconsejable que lo tomen en cuenta» al tiempo que aseveró que esta ley «no es inconstitucional» sino que «es inconstitucional que las emergencias las declare el Ejecutivo; las emergencias las declara sí o sí el Parlamento».
Quien fue el informante de la iniciativa, el peronista formoseño José Mayans, se refirió al mensaje del presidente en el que advirtió sobre «las locuras» de CFK y sostuvo que «dio pena» y que «atacó» a los senadores y le «mintió» a la gente. “Vienen tiempos peores, esto no va a terminar bien”, alertó.
Al mismo tiempo, acusó al Gobierno de «dolarizar» las tarifas y puntualizó en el caso de la electricidad ya que las generadoras “reclaman un costo de 75 dólares el megavatio”, que subió “1.300 % en dos años”. Resumió sus críticas asegurando que los aumentos son «impagables» y «demenciales» y advirtió que el megavatio llegaría a $ 1.900 con dólar cercano a $ 26, cuando a diciembre de 2015 valía $ 98.
El titular del bloque Justicialista, Miguel Ángel Pichetto, por su parte, afirmó que desde el Ejecutivo y el oficialismo «nunca llegó una propuesta» y enfatizó en que la votación «es un mensaje, aún cuando veten la ley». Además, explicó que los aumentos fueron de 1.157% para el gas, 371% para la electricidad, 484% para el agua, «la más cara del mundo». «No me gusta votar leyes para el veto. Porque es un fracaso de este Congreso», afirmó.
En contra
Esteban Bullrich, senador por Cambiemos y presidente de la comisión de Hacienda y Presupuesto, apuntó contra la oposición al sostener que «sabe que el proyecto no tiene ninguna posibilidad de ser implementado» y por reconocer «que no les importa, porque dicen que quieren enviarle un mensaje al Ejecutivo».
En la misma línea, retrucó las críticas del peronismo y aseguró que “lo que dolarizó la energía en la Argentina fue la política que nos llevó a importar la energía, a pagar de 3 a 5 veces más”, refiriéndose a la gestión kirchnerista.
A su vez, el jefe del interbloque macrista, Luis Naidenoff, deslizó también contra el gobierno anterior y sostuvo que «tienen que hacerse cargo de los doce años, del colapso energético, de pisar las tarifas» en tanto que respondió a los dichos de Pichetto: «¿Qué es esto de mandar un mensaje y una señal? ¿Congelar tarifas? ¿Obligar a las distribuidoras de las provincias a devolver sumas, esa es la señal?».
«La sociedad sabe que este gobierno está al límite que heredó una situación de una bomba que hay que desactivar. Y se toma la decisión de ir al Fondo», consideró el formoseño al tiempo que destacó: «Ojo con ensamblar la bomba en la retirada y cuando viene otro gobierno, mostrar compromiso de arranque y en el primer quiebre, encienden la mecha».
Mega DNU
Al término de la exposición de Naidenoff, se dio paso a la votación que resultó con la sanción de la ley antitarifazo. Luego, en cámara acelerada, se sancionaron las tres leyes en que se dividió el polémico mega DNU que Macri había firmado en el verano. Fue por 52 votos a favor, y 11 en contra.