Es un plan progresivo para que los aranceles lleguen al 1,8 para crédito y 0,8% para débito en 2021. El grupo Prisma acercó la propuesta al Gobierno.
El Gobierno anunciaría esta semana una rebaja de las comisiones por las compras que se pagan con tarjeta de crédito y débito. Pero finalmente no sería a través del proyecto de ley que durante el año pasado se empantanó en el Congreso, sino por medio de un «acuerdo voluntario» entre el Ejecutivo, las emisoras de tarjetas de crédito y los comerciantes.
Según fuentes oficiales, la empresa Prisma -dueña de Visa- acercó la propuesta a principios de la semana pasada, y buscará de forma voluntaria un compromiso con los comerciantes para bajar el tope de aranceles. Por el momento, Mastercard aún estaba analizando si se sumaba a la propuesta de Visa.
El objetivo es que las comisiones que se les cobra a los comercios pasen del 3% actual al 2,5% para tarjetas de crédito este año, y luego al 2,35% en 2018, al 2,15% en 2019, al 2% el año siguiente y finalice en 1,8% en 2021. La baja progresiva también se aplicaría en el caso de las tarjetas de débito: el arancel (hoy en un 1,5%) bajaría a 1,2% en 2017, y luego de forma progresiva hasta el 0,8% desde 2021 hacia adelante.
La medida no tendrá un impacto directo en los precios al consumidor pero sí en el beneficio antes de gastos financieros para los comerciantes.»Al aumentar sus ganancias podrán invertir más y hacerse más competitivos. Y si bajan los aranceles, ayuda a bancarizar la economía», justificaron fuentes de Producción que tienen el visto bueno sobre el acuerdo.