La reprogramación de desembolsos ya está pactada entre las autoridades nacionales y el organismo multilateral.
El Fondo Monetario Internacional confirmó para el próximo viernes 26, la fecha en la que el directorio se reunirá para tratar los nuevos términos del acuerdo stand-by que el Gobierno negoció con el staff del organismo que dirige Christine Lagarde.
Una vez llegado el día, Argentina contará con una línea de financiamiento total de US$57.100 millones de dólares, de los cuales US$15.000 millones ya fueron girados al país, repartidos en mitades para el Tesoro y para el Banco Central.
Tal como lo solicitó el Ejecutivo, el acuerdo sostiene además un anticipo de US$19.000 millones para este año y 2019 de los desembolsos previstos para 2020 y 2021 en el programa original, que se firmó a fines de junio. De aprobarse, Argentina recibirá US$ 3.400 millones este año y US$ 22.800 millones el año siguiente.
El primer pacto con el FMI incluía un préstamo de US$50.000 de los cuales solo este año el Tesoro recibiría US$6200 millones más, además de los US$15.000 ya girados a mitad de año.
Lo que más resalta en el Gobierno es que los fondos son “desembolsables” y no “precautorios” como en el acuerdo anterior. Es decir, se pueden utilizar en cualquier momento que haga falta.