Los que compren divisas por homebanking deberán presentar una declaración jurada en la que se comprometan a no invertir en activos financieros durante cinco días.
El Banco Central salió a poner trabas a una nueva especulación financiera en la Argentina, conocida en el mercado como «rulo», que permitía ganar hasta 7% en pesos en un día.
La entidad monetaria dispuso que quien adquiera dólares como «persona humana», deberá tenerlos en su poder durante cinco días hábiles antes de poder aplicarlos a la compra de bonos o acciones.
Esa operatoria hasta ahora se cerraba en el día: una persona compraba dólares, con esos dólares adquiría un bono (el Bonar 24 era el más usado) y luego vendía ese mismo bono pero cobraba en pesos.
La diferencia de precios entre la cotización del bono en dólares y en pesos dejaba una ganancia del 7% en pesos.
La circular A 6780 estableció como requisito para el acceso al mercado de cambios para la compra de moneda extranjera por parte de personas humanas residentes dentro de los límites mensuales la presentación de una declaración jurada por parte del cliente sw que los fondos comprados no serán destinados a la compra en el mercado secundario de títulos valores dentro de los 5 días hábiles a partir de la fecha de liquidación de dicha operación de cambio».
«Cuando el monto operado por estos conceptos supere el equivalente de US$ 1.000 mensuales en el conjunto de entidades autorizadas a operar en cambios, la operación deberá cursarse con débito a cuentas en entidades financieras locales«, indicó.
La obligación de depositar el dinero resultante en una cuenta bancaria facilitaría la tarea de fiscalización de la AFIP.
La CNV sumaría otra medida para respaldar lo decidido por el Banco Central.
Si se impone la obligación de mantener el activo en cartera por algunas ruedas, la utilidad que se pueda obtener con esta operación es incierta, porque en ese lapso de espera el bono o acción que se compró para hacer la transacción puede bajar de precio, y la ganancia esperada puede terminar en pérdida.
También puede ocurrir lo opuesto: podría darse el caso de que el activo suba de precio entonces al venderlo, la ganancia sea mayor.
Pero en definitiva el Central le agrega incertidumbre al negocio, y seguramente los interesados en realizarlo sean menos.