La Justicia procesó con prisión preventiva este viernes a un hombre llamado Claudio Martín Kusy por ser el presunto responsable de dejar un explosivo casero frente al departamento central de la Policía Federal que contenía dentro mensajes amenazantes con la firma del Partido Obrero (PO).
El juez federal Sebastián Ramos fue quien dictó el procesamiento por el delito de intimidación pública que comprende una pena de dos a seis años de cárcel y que, al usar explosivos, puede extenderse a 10. En tando, Kusy fue detenido por un posible riesgo de fuga o de entorpecimiento de la causa, según lo publicado por Infobae.
En este marco, la Justicia ahora intentará averiguar quien es el segundo autor de la causa que aparece en el video que grabaron las cámaras de seguridad de la zona donde se ve que una persona con un carro de los que usan los cartoneros se paró frente al patrullero y puso un paquete debajo del auto. Luego se observó cómo del interior del carro salió otra persona.
El 5 de enero pasado, un bombero que pasaba por la calle Virrey Ceballos, en el barrio de Montserrat, advirtió un artefacto extraño que se encontraba frente al edificio de del departamento central de la Policía Federal, resultó ser un explosivo casero que contenía mensajes que decían: «P.O. Partido Obrero. Libertad a los arrestados en Congreso o los ataques seguirán».
Dos personas en situación de calle identificaron a Kusy como el principal autor que dejó el artefacto en su posición mientras que un tercero también lo identificó en fotografías. El acusado fue detenido y negó la acusación, pero con las filmaciones y los testimonios el juez Ramos dio por acreditado que se trata de la persona que cometió la amenaza
El magistrado entendió que existe riesgo de fuga y de entorpecimiento de la causa porque el acusado no tiene domicilio en el que se lo pueda encontrar, ya que es una persona que también está en situación de calle y porque tienen antecedentes y condenas penales que cumplió en la cárcel de Ezeiza. El Partido Obrero pidió ser querellante en la causa, pero el juez rechazó el pedido.