El Gobierno tiene en ese sentido un alivio y ahora esperan poder garantizar que se asegurará el normal abastecimiento.
Para alivio del Gobierno Nacional, las principales alimenticias como por ejemplo Arcor, Molinos y Ledesma, aceptaron el congelamiento de precios y comenzaron a enviar a los supermercados nuevas listas de precios con rebajas retroactivas al 1 ° de octubre, cumpliendo con el pedido del secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, según fuentes oficiales.
Más allá que se supera un gran obstáculo en materia de negociaciones, continúan las críticas de las cámaras empresariales contra la decisión de congelar los precios, como ocurrió con la que enrola a las empresas norteamericanas en la Argentina (AmCham) y la de dirigentes cristianos de empresas (ACDE).
La marcha atrás de las principales alimenticias representa un alivio para el Gobierno, que busca que en octubre los precios reflejen el congelamiento y la inflación baje del 3%.
Igual, persisten diferencias: en la lista de casi 1.500 productos que difundió la Secretaría de Comercio figuran algunos precios que, según las empresas, son previos al primero de octubre y corresponden a acuerdos vigentes en julio o agosto.
De acuerdo con esa lectura, el problema sigue siendo que la resolución 1050 fija precios anteriores a octubre y todavía hay discusiones sobre cómo resolver esas diferencias.
En el Gobierno esperan poder garantizar que se asegurará el abastecimiento normal, ya que las empresas fabricantes se quejan de que sus costos continúan subiendo. Sostienen que, ante ese escenario, será muy difícil mantener los precios congelados hasta el 7 de enero de 2022.