La gobernadora postergó un paquete de medidas sociales a la espera de fondos nacionales.
Los reclamos de fondos para la provincia de Buenos Aires y las medidas de impacto social que quedaron en stand by en la provincia por el movimiento en los mercados fueron algunos de los tópicos que abordaron ayer la gobernadora María Eugenia Vidal con Mauricio Macri en una extensa reunión en la Casa Rosada.
El equipo de Vidal había evaluado en los últimos días un paquete de ayuda social para la provincia. Las partidas debían ser conversadas con la Nación. Pero por ahora esos anuncios no tienen fecha cierta. «Está todo en estudio, no vamos a anunciar nada que no podamos cumplir«, advierten en el entorno de la gestión bonaerense.
Hoy, el equipo de la provincia se dio cita en una reunión de gabinete ampliado. Asistieron unas 300 personas, entre ministros, secretarios y directores provinciales en el SUM de casa de gobierno de La Plata. Hoy Vidal inició su charla frente a los funcionarios refiriéndose a Lacunza, que hasta días atrás integraba sus equipos. «Hable con Hernán (Lacunza). Solo le dije que no se deje llevar por las presiones políticas, que piense en los argentinos», dijo la gobernadora a su tropa.
Cerca de Vidal lo calificaron como «un consejo personal», por la relación laboral que tuvieron, para que el ministro de Hacienda se «abstraiga» de las declaraciones políticas.
Lacunza había decidido suspender -a nivel nacional- medidas sociales que estaban previstas para la semana de su asunción. El funcionario priorizó la estabilidad del dólar, antes de hacer nuevos anuncios. «Estamos cuidando los números fiscales en medio del pedido de desembolso al FMI, con el mercado midiendo todos los días cuánto gastamos», señalan en el Gobierno.
En otras palabras, en el Gobierno advierten que no tiene sentido hacer anuncios de ayuda social en medio de la volatilidad que están mostrando los mercados, porque las medidas podrían verse licuadas por la devaluación rápidamente.
En ese escenario, tensionado también por las conversaciones con el FMI, desde La Plata reeditaron en las últimas horas su reclamo por los casi $25.000 millones del Fondo del Conurbano. Un pedido antiguo, y casi una chicana, que volvió a ser mencionado en el entorno de Vidal, en medio de la crisis económica y la adversidad política.
Cerca de la gobernadora dejaron transcender que el Fondo del Conurbano es dinero «que le corresponde a la provincia» y que serviría, en principio, «para bajar el déficit del distrito» y dejar las cuentas de la provincia más ordenadas.
En la Casa Rosada rechazan que el Fondo del Conurbano esté sobre la mesa. «No hay plata, y es inoportuno», subrayan.
Así, la sintonía política que buscan dar Vidal y Macri de cara a las elecciones se ve atravesada por las tensiones económicas que acarrea, en ambas administraciones, la nueva crisis en los mercados. Los anuncios que hizo el Gobierno tras las PASO (deducción del IVA de la canasta básica y de la suba del mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias) afecta especialmente a la recaudación de la provincia.
Fuente: La Nación