Sólo vehículos autorizados, residentes que tengan el permiso y quienes alquilen cocheras en la zona podrán pasar por la zona más transitada de Capital Federal.
Luego de 40 días desde que se implementara la medida, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires comenzará a multar a los autos que circulen sin permiso por el área peatonalizada del microcentro porteño.
Desde el 3 de abril, los autos y motos particulares ya no pueden circular por el Casco Histórico de la Ciudad y parte del barrio de Retiro de 11 a 16, a menos que sus conductores tengan un permiso.
Con la extensión de esta área peatonal, la zona restringida total se ubica entre las avenidas Carlos Pellegrini (y su continuación, Bernardo de Irigoyen), Belgrano, Paseo Colón, La Rábida, Leandro N. Alem y Santa Fe, y las calles San Martín y Florida. La circulación por las avenidas está garantizada, pero no así por las calles internas.
Según datos proporcionados por la secretaría de Transporte porteña, la cantidad de autos circulantes por esa zona bajó un 38%. De 8.300 vehículos por día en el horario restringido se pasó a 5.150.
La Ciudad ya otorgó 10.817 licencias, tiene otros 1.261 en trámite y estima que terminará entregando unas 20.000. A la zona restringida pueden entrar los taxis, remises, vehículos de bomberos y policías, camiones de caudales y ambulancias.
Por otra parte, las licencias serán extendidas a residentes, personas con un certificado de discapacidad, padres de alumnos de escuelas dentro del perímetro, camiones de caudales, empresas de servicios fúnebres, vehículos de distribución de diarios y quienes tengan o alquilen una cochera fija. En el último caso, la licencia tiene un coste de $1.560; en los otros casos contemplados es gratis.
Las multas por circular en esa zona sin licencia serán de $1300. El cumplimiento será controlado con cámaras de reconocimiento de patentes (LPR).