El ex jugador de Boca Juniors presentó un escrito ante el magistrado en el cual admitió que vendió propiedades al presunto jefe de la banda, pero se desvinculó de las operaciones posteriores. En 10 días el juez Néstor Barral deberá decidir si lo procesa, sobresee o dicta falta de mérito.
Mauricio Serna se presentó en Morón porque fue citado a indagatoria ante el juez federal Néstor Barral, quien lo investiga por lavado de dinero del narcotráfico. Tal como habían hecho el lunes María Isabel Santos Caballero y Sebastián Marroquín (viuda e hijo del capo narco colombiano Pablo Escobar Gaviria), imputados en el mismo expediente, “Chicho” presentó su descargo a través de un escrito.
Los abogados del ex jugador de Boca Juniors, estructuraron su defensa en tres ejes: cómo consiguió su dinero; cómo se hicieron las operaciones inmobiliarias objetadas y finalmente un descargo sobre posible operaciones de lavado a manos del colombiano José Piedrahita Ceballos, quien es investigado por el juez Barral y los fiscales Sebastián Basso y Diego Iglesias por invertir dinero proveniente del tráfico de cocaína a través de un mega proyecto inmobiliario en Pilar encabezado por el abogado argentino Mateo Corvo Dolcet y diferentes emprendimientos gastronómicos, según constató Clarín.
“Chicho” Serna,quien ya hace una década fue relacionado con las víctimas del doble Crimen de Unicenter y los narcoparamilitares de su país, contestó por escrito a la acusación de una supuesta “venta simulada” de una propiedad suya en el country San Diego a Piedrahita Ceballos.
En el escrito la ex estrella del “Xeneize” dijo que el dinero de su patrimonio lo hizo en el fútbol, donde tuvo muy buenos contratos como jugador. “Según él, conoció a Piedrahita en un restorán de Puerto Madero allá por el 2006. Un mozo se le acercó y le dijo que un colombiano quería conocerlo”.
“Cuando Serna decidió volverse a Colombia, Piedrahita se ofreció a comprarle todas sus propiedades en Argentina porque el pensaba mudarse para acá. Por la casa en el country le pagó 550.000 dólares y unos 100 mil más por dos terrenos en el emprendimiento Terravista. También le compró los dos autos”, agrego una fuente de la defensa.
En 10 días el juez Néstor Barral deberá decidir si lo procesa, sobresee o dicta falta de mérito.