La portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, reveló que el Gobierno considera que «hay temas más prioritarios» que el de la posible derogación de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias.
En su conferencia habitual de los jueves, la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, se refirió al proyecto impulsado por el kirchnerismo para eliminar las PASO y descartó esta posibilidad ya que «hay una ley vigente y es buena». Aprovechó para enviarle un mensaje al Congreso para que se avance con el tratamiento del proyecto de Renta Inesperada.
Tras ser consultada por las presiones alineadas tanto de Sergio Massa, ministro de Economía, como de Eduardo ‘Wado’ de Pedro, ministro del Interior, para que se deroguen las elecciones primarias, la portavoz expresó: «Hay una ley vigente y es buena. Y el proceso de convocatoria en marcha. Las primarias implican más democracia y más participación. Creemos que en un momento donde muchos actores políticos intentan generar situaciones antipolíticas o el descreimiento de la gente en la política, cuanto más discusión y participación haya, mejor es«.
Habiendo dejado de lado la opción de que estas elecciones se suspendan o eliminen, sostuvo que «el Gobierno cree que en la agenda del Congreso hay temas más prioritarios que las PASO. Por ejemplo, el proyecto de ley enviado en junio de Renta Inesperada, para que quienes recibieron ganancias por situaciones trágicas como una pandemia y una guerra, hagan sus aportes».
«Necesitamos que se apruebe ese proyecto porque significa mayores ingresos para el Estado que van a poder ser redistribuidos en muchas de las políticas que muchos sectores reclaman», ahondó.
Luego, se respaldó en la aplicación de este gravamen en otros países y detalló: «El Gobierno ha enviado en junio de este año un proyecto que quiere que se discuta en el Congreso, que está vigente en otros países con muy buenos resultados«.
«El Presidente lo habla con los líderes del mundo todo el tiempo. En este momento está en debate en Alemania y en Portugal; en Alemania, incluso en ser retroactivo», completó.
El proyecto de renta extraordinaria consiste en aplicar la alícuota del 15% a las empresas que tengan rentabilidad operativa mayor al 10% sin importar el origen de ese margen, es decir cobrarles un impuesto a aquellas grandes empresas que hayan sido beneficiadas por el contexto mundial y que les haya permitido aumentar con amplio margen los precios de venta por sobre los costos de producción.
Este impuesto se aplicaría en todo el ejercicio fiscal 2022 de manera excepcional y estiman que aproximadamente unas 350 empresas se verían obligadas a afrontarlo, permitiendo redistribuir ingresos entre trabajadores formales.
