“La temporada 2018 fue muy buena y el feriado de Carnaval resultó una oportunidad para que muchos comercios reactiven sus ventas”, dijo Fabián Tarrío, presidente de CAME.
Con un ingreso en el primer fin de semana largo de 2,2 millones de turistas, la Argentina vivió un interesante movimiento económico y se gastaron $ 7123 millones. El gasto directo a precios constantes creció 2,7%. Además, los comercios consultados declararon un incremento de 1,5% en las ventas ligadas al turismo.
Según los estudios estadísticos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresas (CAME), tomando en cuenta 40 ciudades turísticas de todo el país, el gasto promedio estuvo en $850 por turista incluyendo transporte, alimentos, entrada a los carnavales, espuma para los chicos y teniendo en cuenta que el 83% de los turistas que viajan pagan alojamiento. El año pasado, para el mismo fin de semana, el gasto promedio fue de $680 (y el gasto total de $5.555,6 millones).
Comparando con los carnavales del 2017, el gasto directo total creció 28,2% si se quita el efecto inflación (24,8% anualizada en enero), el gasto directo subió 2,7% (a precios constantes del año pasado). El mismo estudio arrojó una suba del 1,5% en las ventas vinculadas al turismo.
El clima tuvo mucho que ver en la armonía de los festejos, salvo unos chaparrones en algunas zonas aisladas el día sábado y la mañana del domingo, prevalecieron el sol y temperaturas agradables.
Los destinos más elegidos fueron las ciudades localizadas en la Costa Atlántica, Gualeguaychú (que es la cuna del Carnaval), las playas y termas de Entre Ríos, las ciudades del norte argentino con sus carnavales autóctonos y las del interior cordobés, que son atractivas en cualquier momento del año.