Según informaron, el ataque destruyó parcialmente varios complejos residenciales dejando a cientos sin hogar.
Un nuevo ataque masivo lanzado por Rusia contra Kiev dejó al menos nueve muertos y 63 heridos en la madrugada de este jueves, según confirmó el alcalde de la capital ucraniana, Vitali Klitschko.
La ofensiva, compuesta por misiles y drones, golpeó varios distritos de la ciudad, provocando una cadena de explosiones que causaron graves daños estructurales y sembraron el pánico entre la población.
Las detonaciones se registraron en las primeras horas del día, sacudiendo con violencia edificios residenciales y zonas urbanas. Testigos grabaron el momento en que los impactos rompían el silencio nocturno, seguidos por densas columnas de humo que cubrían bloques enteros y por sirenas de emergencia que resonaban entre los restos de las estructuras dañadas.
«Los socorristas siguen trabajando en múltiples ubicaciones. El balance de víctimas puede aumentar», advirtió Klitschko a través de sus canales oficiales.
Una de las imágenes más difundidas muestra a bomberos extinguiendo llamas que consumían un edificio parcialmente colapsado, mientras civiles corrían desorientados entre fragmentos de concreto y restos de cristales. Muchos de los heridos fueron atendidos en plena calle ante la magnitud de los daños en centros de salud cercanos.
El ataque destruyó parcialmente varios complejos residenciales, dejando paredes abiertas, techos desplomados y balcones arrancados. En algunos casos, los misiles impactaron directamente sobre las fachadas, arrancando secciones completas y dejando al descubierto los interiores de los apartamentos. El nivel de destrucción dejó a cientos de personas sin hogar en cuestión de minutos.
El ataque, según informaron las autoridades, involucró el uso de misiles balísticos de gran alcance. La Administración Militar de Kiev calificó el bombardeo como un “ataque combinado”, lo que implica una coordinación entre diferentes tipos de armamento, incluyendo misiles de largo alcance y drones de vigilancia.
Además, la entidad advirtió a la población sobre la probabilidad de nuevos ataques y exhortó a los residentes a mantenerse en alerta, ya que se preveía que las fuerzas rusas reanudaran los bombardeos en las próximas horas.