El escrutinio rápido alcanzó el 96% de las actas escrutadas y muestra una diferencia de menos de 10 puntos a favor del actual presidente.
A pesar de que esta mañana se anunció el triunfo de Evo Morales en primera vuelta, los resultados de las elecciones en Bolivia volvieron a cambiar de rumbo y suman más incertidumbre a la situación que vive ese país tras la denuncia de fraude que radicó la oposición.
De acuerdo al conteo rápido, con el 95,63% de las actas escrutadas, el mandatario obtenía el 46,4% de los votos contra el 37,07 de Carlos Mesa, lo que desembocaría en una segunda vuelta.
El domingo a la noche, luego de una jornada electoral que había transcurrido en paz, los dato preliminares con casi el 84% de los votos escrutados, daban ganador a Morales, pero con una diferencia de apenas 7 puntos en relación a Mesa (45,28% contra 38,16%), que obligaba a una segunda vuelta.
Sin embargo, luego se suspendió el escrutinio y Mesa salió a denunciar que el gobierno buscaba modificar las cifras para evitar un balotaje. El giro que desató la violencia en varias ciudades fue la decisión sorpresiva del TSE de publicar el lunes los datos del sistema de transmisión de datos preliminares TREP al 95,09% y que, lejos de la tendencia anterior, le daban al candidato oficialista una victoria con el 46,86% de los votos, frente a 36,74% de Mesa.
Por otro lado, en el conteo definitivo, que avanza más lentamente, con poco más del 75% de las actas escrutadas, el presidente Evo Morales suma el 42,37% de los sufragios contra el 41,68% de Carlos Mesa, el líder de Comunidad Ciudadana.
Así, la polémica se mantiene, más allá de una eventual segunda vuelta. Es que la escasa diferencia de poco más de un punto que muestra ese conteo contrasta con los datos que ofrecía el conteo rápido, que le daba casi 10 puntos de ventaja al actual presidente.
La misión de observadores de la Organización de los Estados Americanos (OEA) consideró que es “inexplicable” el cambio de tendencia que había mostrado el conteo rápido y advirtió de que “genera pérdida de confianza en el proceso electoral”.
En tanto, la Embajada de Estados Unidos en Bolivia solicitó al Tribunal Electoral que “actúe inmediatamente para restaurar la credibilidad en el proceso de conteo de votos”, a la vez que alertó a sus nacionales para eviten verse afectados por episodios de violencia como los de la pasada noche.