El Xeneize pudo haberlo perdido como ganado y redondeó una actuación correcta en los 2500 metros de Cochabamba.
Boca inició su camino en la Copa Libertadores con un empate sin goles frente a Jorge Wilstermann, en un partido disputado en el estadio Félix Capriles de la ciudad de Cochabamba, a 2.500 metros sobre el nivel del mar, y correspondiente a la primera fecha del Grupo G del certamen.
El primer tiempo fue chato, con pocas ocasiones de riesgo, mientras que en el segundo los dos lograron llegar con peligro y tuvieron oportunidades para quebrar el marcador, por lo que el resultado final terminó siendo justo.
A los 21 minutos del primer tiempo se produjo una acción polémica, cuando Alex Silva le aplicó un pisotón a Agustín Almendra y lo derribó en el área local, pero el árbitro chileno Julio Bascuñán no cobró el penal.
El próximo compromiso del elenco «xeneize» será el próximo martes como local del colombiano Deportes Tolima, mientras que el conjunto boliviano visitará dos días después a Atlético Paranaense en Brasil. Por este grupo, el conjunto colombiano se impuso al brasileño por 1-0.
